Ya antes Pablo Zabaleta había anticipado lo estricto y riguroso que es el método de Josep Guardiola al frente de Manchester City, confesando que el estratega les obligaba desayunar y almorzar todos juntos en el club para controlar su nutrición.

La medida, considerada obsesiva por muchos, tiene como objetivo contribuir a la sana alimentación de sus jugadores para que puedan tener una mejor condición física, algo que ya ha instaurado en sus anteriores desafíos deportivos en Barcelona y Múnich.

Y esta vez el técnico de Santpedor decidió tomar otra medida para contribuir con el cambio de hábito alimenticio de sus jugadores, pues según Mirror, habría prohibido el consumo de chocolate.

El estratega habría ordenado y comunicado a los futbolistas además del resto del cuerpo técnico, que ya no podrían adquirir chocolate y otros productos azucarados en la sede de entrenamiento del Manchester City, de donde serían retirados este tipo de productos que antes lucían las máquinas expendedoras.

Si algún jugador quiere comer chocolate podrá hacerlo, pero bastante lejos del centro de entrenamiento.

Pep cuenta con la ayuda de la triatleta Sílvia Tremoleda, nutricionista que ya antes había trabajado en el Barça y con la cual Guardiola -por ejemplo- prohibió al llegar al City el consumo de canapés, pizzas, pastelería, cerveza y refrescos.