Un papelón“, decían ayer en la prensa argentina tras el insólito retraso de Atlético Tucumán que casi les impide jugar la definición ante los ecuatorianos de El Nacional por la fase 3 de Copa Libertadores.

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El ‘Decano‘ decidió llegar sobre la hora para que los 2.600 metros sobre el nivel del mar no fueran un factor tan relevante para sus jugadores, sin embargo, jamás pensaron que sería el tiempo el que en realidad los pondría contra la pared.

Según detalla el diario La Nación, el primer vuelo de la escuadra solo llegaba hasta Guayaquil, en donde esperaron -desde el domingo- para evitar el efecto de la altura y desde ese lugar, un chárter los debía trasladar hacia Quito, horas antes del partido.

No obstante un presunto problema con las autoridades aeronáuticas locales impidió que el avión de la empresa chilena Mineral Airways (filial del consorcio de Aerovías DAP, cuya sede se encuentra en Punta Arenas) despegara del aeropuerto José Joaquín de Olmedo, debido a que no habría tenido la documentación en regla.

El medio ecuatoriano Expreso explica que “la aeronave no estaba habilitada para operar en la terminal aérea de Tababela“, en Quito, por lo que su despegue fue cancelado.

A raíz del imprevisto, el presidente de la institución tucumana, Mario Leite, gestionó en breve otro chárter para trasladar a los 19 jugadores, el cuerpo técnico y unos pocos dirigentes, al momento en que además notificaba de lo sucedido a las autoridades de la Conmebol.

La salida del equipo desde Guayaquil se concretó a 40 minutos de comenzar el compromiso, llegando una hora y 15 minutos más tarde (el reglamento solo permite 45 minutos de retraso), tras abordar un chárter de la empresa Latam detalla Olé.

Mineral Airways se refirió mediante Twitter a la bochornosa situación, descartando su responsabilidad en el retraso del vuelo.

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La postura de la Dirección General de Aviación Civil del Ecuador (DAC) contrasta y afirma mediante un comunicado, que el vuelo incumplía con la regulación aeronáutica del Estado ecuatoriano.

La historia siguiente pasó a ser una “epopeya” del otro lado de la cordillera, con el bus de Atlético viajando por la capital ecuatoriana a 130 Km/h para llegar al estadio Olímpico Atahualpa en donde jugaron con indumentaria cedida de la sub20 argentina y ganaron por la cuenta mínima.

Bus de Atlético Tucumán

En cuanto a lo deportivo, los trasandino ahora deberán jugar ante los colombianos de Junior de Barranquilla en busca de acceder a la fase de grupos de la competencia internacional.