A mediados de 2012 Anthony Modeste estaba en el peor momento de su carrera como profesional. El Blackburn Rovers decidió no contar más con el delantero tras una temporada en la que solo apareció en nueve partidos y no anotó ningún gol. Fue catalogado como el segundo peor refuerzo de la Premier League por el sitio Football365.

Hoy, a poco más de cuatro años de su paupérrimo paso por Inglaterra, este delantero es el goleador de la Bundesliga y lidera la carrera por la Bota de Oro, superando a Lionel Messi, Luis Suárez y Cristiano Ronaldo, entre otros.

A Modeste le calzaron el rótulo de “promesa” cuando estaba en las inferiores del Niza. No era un derroche de virtudes con el balón en los pies, pero paleaba sus limitaciones con su potente físico y su simpleza para resolver las jugadas.

Para que se fogueara y sintiera el rigor del profesionalismo lo enviaron a préstamo al Angers. En el oeste de Francia se erigió como figura al alcanzar 20 tantos. Sus buenas actuaciones lo llevaron a la sub-21 de la selección gala.

Ya con un nombre en la elite francesa, el Bordeaux posó sus ojos en él y decidió ficharlo por 3,5 millones de euros en 2010. Su principal meta en el club que venía de ser campeón de la Ligue 1 hace un año sería reemplazar al goleador marroquí Marouane Chamakh, transferido al Arsenal.

En la ciudad portuaria, Modeste no pudo responder a su cartel de goleador. A fines de 2011 lo mandaron al Blackburn Rovers a préstamo. En una de las ligas más competitivas del mundo, el ariete no pudo dar la talla.

Con su prestigio por el suelo, el Bordeaux decidió enviarlo nuevamente a préstamo, aunque esta vez en el plano local. El modesto Bastia le permitió al goleador volver a sentir viejas sensaciones. Su media goleadora de casi medio gol por partido con “Les Blues” le volvió a abrir las puertas del extranjero. Esta vez tendría que probarse en la dura Bundesliga alemana.

Llegó al Hoffenheim en 2013 y no defraudó. Sin embargo, su explosión definitiva se dio en el Colonia, equipo al que llegó a principios de la pasada temporada.

En su debut dio el campanazo anotando un hat-trick. Sus 18 goles llamaron la atención del West Ham, pero rechazó volver a territorio británico, así como irse a China, para terminar de consagrarse en el club teutón.

Y vaya qué le ha resultado la apuesta. Esta temporada sus 13 goles en 11 partidos tienen al Colonia cuarto en la tabla de posiciones, a cinco punto del Bayer München.

La temporada se encargará de decir si fue una ráfaga o si estamos ante el nacimiento de goleador de fuste. El que fuera uno de los peores refuerzos de la liga inglesa, está tapando bocas.