Una serie de reacciones se ha desencadenado desde el empate logrado por la ‘Roja’ ante Bolivia en el estadio Monumental. Principalmente en torno a las acusaciones de la FBF por lo cánticos locales en contra de dicho país, que la ANFP por cierto rechaza indicando que se defenderá al respecto.

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Pero no todas las cosas son diferencias entre un lado y otro. Carlos Lampe, el arquero que la noche del martes le cerró por completo el arco a los de Pizzi es prueba de ello, pues vivió una jornada mágica que de seguro recordará por largo tiempo.

El guardameta de Huachipato, que se alzó como el héroe en el trabajo de la ‘Verde’, habló del compromiso ante el ‘Equipo de Todos’ evidenciando su satisfacción.

“Fue una jornada inolvidable, de pura alegría, porque ganamos un punto ante la mejor selección de Sudamérica y una de las mejores del mundo“, indicó al medio boliviano Diez.

El reconocimiento también se lo llevó tras reintegrarse al trabajo con el conjunto ‘Acerero’ en Talcahuano, en donde más de alguna burla -en buena- recibió de algunos compañeros.

“Todo el cuerpo técnico me felicitó por mi trabajo (…) Desde que llegué aquí (Huachipato) he crecido mucho como profesional (…) Frente a Chile salí jugando en cuatro ocasiones -con los pies- y pude hacerlo bien, a pesar de la presión asfixiante del rival”, expuso detallando el particular recibimiento del plantel.

Varios me molestaron porque dijeron que me tiré mucho al piso para perder tiempo, que era un teatrero, pero con buena onda. Además me mostraron muchos memes que hicieron acá, en Chile”, expuso, argumentando que sí hizo mas tiempo por la circunstancia, “nos estaban atacando mucho“.

Lampe dice no saber realmente si hubo insultos en contra de él, pues afirma que estuvo en todo estuvo momento metido en el encuentro, por lo que le bajó el perfil a la situación. “En algún momento escuché algo, pero lo normal de un partido de fútbol. Por ahí algún cántico referente a los bolivianos“.

Tras el partido el meta tomó vuelo rumbo a Concepción para ponerse a las órdenes de Miguel Ponce, su regreso al lugar de trabajo no fue para nada normal según comenta, pues de camino al aeropuerto notó que todas las miradas se volcaban hacia él.

Cuando iba caminando al aeropuerto de Santiago sentía que la gente me miraba como si fuera un bicho raro, pero bueno, todo con respeto“, explicó, revelando una particular anécdota ocurrida arriba del avión.

“Cuando estaba sentado en el avión pedí un sándwich que costaba $4.000 y quise pagar con un billete de 10.000, pero la azafata no tenía vuelto, entonces un señor que estaba sentado a mi lado le dijo a la chica que él iba a pagar, me iba a invitar y que Chile pagaba“, puntualizó el arquero.

Finalmente el seleccionado boliviano adelantó que su objetivo personal es poder llegar a un club grande de Chile o de Sudamérica, aunque no se queda ahí pues Europa también le motiva en el horizonte.

Debo crecer más porque me gustaría ir a Europa, si no a un grande de Chile o de Sudamérica. Acá, en Huachipato, estoy muy cómodo, me tratan excelente y eso da confianza para mejorar todos los días”, finalizó.