Lo que había nacido como rumor, rápidamente se ha transformado en toda una realidad. El quiebre entre Pablo Guede y Julio Barroso tiene por las cuerdas a un Colo Colo que en una semana pasó del cielo al infierno.

Si el entrenador argentino la estaba pasando mal por el rendimiento del ‘cacique’, ahora debe sufrir por la postura del defensor ‘albo’, a quien se le vio ofuscado tras el duelo ante Delfín, y no consideró para el partido ante San Luis de Quillota.

En el entretiempo de ese encuentro, el ‘almirante’ aprovechó para lanzar una ‘bomba’ a través de las redes sociales. El equipo había perdido y más encima tuvo que lidiar con el descontento de su compañero.

Sin embargo, en el camarín el cuento era diferente. “¿Se dan cuenta que tengo razón, que toda la presión que estamos generando como cuerpo técnico es mala para ustedes? Es mi culpa muchachos…”

Aquellas palabras de Guede encontraron una rápida respuesta en Jorge Valdivia. “¿Acaso crees que los goles que nos perdemos son por eso?”.

“No, ‘mago’, pero están queriendo hacer todo perfecto y no resulta”, contestó el ‘puto amo’.

El mismo respaldo que se vio ante San Luis es el que terminó convenciendo a Guede el viernes por la tarde. El entrenador había notificado su renuncia, se lo comunicó a Aníbal Mosa y posteriormente a sus jugadores. Pero ellos lo hicieron cambiar de parecer.

“‘Mago’, ya no puedo exprimirlos más, no puedo sacarles más rendimiento…Hacés doble turno todos los días. ‘Pajarito’ Valdés lo mismo”… “‘Tanque’, no sabés como te cuidas, estás más flaco que nunca… Yo me voy, es lo mejor para ustedes, para el club. Hay tiempo para la Copa también”, dijo el entrenador en aquella larga reunión con el plantel.

Según reveló El Mercurio, Carlos Carmona cuestionó las palabras de su DT. “Vine a Chile por usted. Pagué dinero de mi bolsillo para estar acá, ¿y ahora me va a abandonar?”. Rápidamente la mayoría de los jugadores del plantel comenzaron a respaldar las palabras de Carmona, pero Guede no daba marcha atrás.

Así que tras tres horas de reunión, los jugadores gestionaron un llamado telefónico que el argentino escuchó atentamente. Aquellas palabras lo convencieron y decidió quedarse.

Posteriormente se dio una conferencia con el apoyo del plantel. Pero había alguien que no se encontraba en la sala de prensa de Colo Colo. Su nombre es Julio Barroso.

“Hace un mes, más o menos, Guede le dijo a Barroso que si jugaba con línea de cuatro él no sería titular, porque Zaldivia e Insaurralde, consideró, estaban en un mejor nivel… Si jugaba con línea de tres, sería titular. Pero se lo dijo en la cara”, revelaron en Macul.

En la interna de Colo Colo detallan que días antes de la Copa el defensor se hizo un tratamiento en su espalda, algo que perfectamente pudo haber hecho en sus vacaciones.

Pero en la dirigencia creen que el enojo de Barroso tendría otro origen. “Barroso vio que a todos los grandes se les renovó contrato, mientras el suyo termina en diciembre y no hay interés en extenderlo. Quizás busque una salida anticipada, pagándole un dinero de por medio, claro está”.

Con todos estos problemas Pablo Guede deberá hacerle frente a Universidad de Chile. Una derrota del ‘popular’ catapultaría la continuidad del entrenador. Además, pondría en una encrucijada a Aníbal Mosa, al despedir a quien una semana antes había rogado que no se fuera.