Los campeones defensores Golden State Warriors, con 29 puntos de Stephen Curry, vencieron en la noche del jueves a los Cleveland Cavaliers 124-114 en tiempo extra, para salir al frente 1-0 en la gran final de la temporada 2017-2018 de la NBA.

Los Caveliers desperdiciaron una soberbia actuación de 51 puntos del astro LeBron James, permitiendo que los Warriors ganaran el período adicional 17-7 para llevarse el primer encuentro de la serie, al mejor de siete partidos, que continúa este domingo en la misma sede de los campeones.

Los Warriors salieron agresivos en el tiempo extra con un sorpresivo ataque de 7-0 y consiguieron ponerse rápidamente al frente 114-107, gracias a un triple de Klay Tompson. Finalmente, los campeones defensores no quisieron perder la ventaja de localía y arrancaron 1-0 en este tope.

Secundaron a LeBron en la ofensiva de los Cavaliers Kevin Love, con 21 tantos y 14 rebotes y J.R. Smith con 10 puntos, en tanto, por los Warriors escoltaron a Curry el también astro Kevin Durant (26 puntos) y Thompson (24).

El partido estuvo marcado por algunos polémicos cobros de los jueces y también por la extraña actuación del antes mencionado Smith, quien no reaccionó adecuadamente tras ganar un rebote cuando el marcador estaba igualado a 107 puntos y faltaban menos de cinco segundos para el final del tiempo regular.

Smith decidió conservar el balón en vez de lanzar o habilitar a LeBron James, reaccionando con un pase desesperado a Hill, quien falló ante el apuro. La expresión de James, incrédulo ante la jugada de su compañero, resumió todo.

Además, sobre el final del tiempo extra, se produjeron incidentes entre jugadores de ambos equipos. Un diálogo poco amistoso entre James y Curry calentó los ánimos y derivó en un cruce entre Tristan Thompson y Draymond Green, luego que este último aplaudiera de manera irónica al primero, quien lo golpeó con la pelota, por lo que terminó siendo expulsado.