Albert Hughes Jr es un boxeador de 70 años que acaba de entrar en los libros del Récord Guiness tras protagonizar una emotiva historia de superación.

Todo comenzó cuando decidió convertirse en el boxeador más longevo en disputar un combate. Además de lo histórico que sería, la motivación extra era poder conectarse con su hijo, un militar retirado con serios problemas de adicción al alcohol y las drogas.

Todo parecía ir por el camino correcto, sin embargo, una triste noticia alteraría su preparación. Su hijo no logró superar el complicado momento que atravesaba y decidió quitarse la vida.

Un duro golpe que no logró aplacar las ganas del boxeador, que el 14 de diciembre se plantó en un ring de Indianapolis para hacerle frente a Tramane Towns, púgil de 43 años que nada pudo hacer contra la experiencia.

Hughes hizo valer los 21 combates que disputó entre 1975 a 1983 y lo derrotó con dos certeros golpes que lo hicieron caer a la lona, en un cruce donde su rival evitó el enfrentamiento directo.

Tras el toque de la campana, el histórico boxeador explicó las razones que lo motivaron a no decaer en medio del triste momento.

Según consignó Infobae, Hughes señaló que “cuando ocurrió su suicidio pensé en no realizar el combate. Dije ‘Diablos con eso’. Pero luego pensé que en los últimos meses él estaba vivo, se jactaba tanto de mí, estaba orgulloso. Así que seguí pensando en la pelea y finalmente llegué a la conclusión de que debía hacerla”.

“Me paré frente a sus cenizas y le dije: Hijo, voy a hacer esto por ti, porque realmente querías que lo hiciera”, detalló el boxeador. Después vendría un emotivo momento: se juntó con su familia en medio del ring y mostró una foto de su hijo.

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