Kimi Raikkonen, piloto finlandés de Fórmula Uno, fue el foco de todos en la ceremonia de gala de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), efectuada en San Petersburgo, Rusia.

El piloto de Ferrari protagonizó un curioso momento cuando, saltándose todos los protocolos de la ceremonia, subió al escenario para felicitar a su compañero de escudería, el alemán Sebastian Vettel.

Según consigna Marca, mientras Vettel esperaba en el escenario a que le entregasen su galardón como segundo clasificado de la competencia automovilística, Raikkonen, pese a que los organizadores trataban de sujetarle, subió al escenario para abrazar continuamente a su compañero con evidentes síntomas de haber bebido alcohol.

Además de su irrupción en la ceremonia, a Raikkonen se le vio fumando puro, bailando y tropezando con algunas mesas, una actitud muy diferente a la que caracteriza al ‘Iceman’ (hombre de hielo).

El momento protagonizado por el finlandés se tomó las redes sociales y terminó opacando los reconocimientos a su compañero y al británico Lewis Hamilton, campeón de Fórmula Uno en la temporada 2018.