Una particular situación se vivió este martes cuando los conjuntos de El Nacional de Ecuador y San José de Bolivia se dieron cita por el duelo de ida de los octavos de final de la Copa Sudamericana 2018.

Y es que en el encuentro que se terminó inclinando en favor del elenco ecuatoriano por 2 tantos a 1, donde el portero Johan Padilla protagonizó una acción al más puro estilo del mejor cine de Hollywood.

¿Qué ocurrió? Corría el minuto 89 de juego y la paridad en el tablero le daba el pase a la siguiente fase de la cita continental a los ecuatorianos, razón que llevó al meta a demorar un saque de fondo.

No obstante, éste no se dio cuenta que su teatro se demoró más de la cuenta y que el árbitro central del encuentro, el venezolano José Argote, no le dejaría pasar la gracia.

Allí ocurrió lo cómico, puesto que el juez llanero se acercó hasta el meta para mostrarle tarjeta amarilla y llamarle la atención por el hecho, tocándole suavemente el pecho a modo de corregirlo. Ante esto el golero se fue con todo hacía el suelo, insinuando que Argote le había propinado un brutal empujón, el que lo desestabilizó y lo envió directo al césped.

Como era de esperar, la “agresión” que acusó el cafetero de parte del árbitro solo causó risas entres quienes se encontraban mirando atentamente el encuentro, ya que desde lejos se podía constatar que solo fue una mala actuación.

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