Con fracturas en su nariz, mandíbula, pómulos y muñeca terminó el jugador Adam Yates, luego del brutal choque que protagonizó con el guardameta de su equipo, San Hornby, en el encuentro que el Port Yale y el Morecambe disputaron por la cuarta división de la liga inglesa.

Según constató el medio español Marca, el futbolista de 34 años chocó con su compañero de labores cuando ambos fueron en busca del balón. No obstante, quien sacó la peor parte fue Yates, el que de momento se encuentra a la espera de saber si quedará con daños crónicos en su visión.

“Estamos todos decepcionados por él y su familia. No esperas ir a una cancha y ver la magnitud de las lesiones que él sufrió el martes. Fracturarse el pómulo, la cuenca del ojo, la nariz y la muñeca en el mismo accidente. Nunca había escuchado sobre esto en toda mi carrera”, señaló Neil Spin, entrenador del futbolista.

El defensa en tanto, quien se recupera favorablemente, también alzó la voz para agradecer a todos aquellos que han estado preocupados y pendientes de él tras este accidente.

“Después de años de carrera sin problemas, he sufrido las dos peores lesiones que se pueden imaginar, en los pasados 18 meses. Pero la más reciente puede acarrear problemas a largo plazo y en este momento no sabemos la magnitud del golpe en mi ojo”, manifestó.

Tal como lo indicó el mismo jugador, esta ha sido la segunda peor lesión de su vida luego de que se perdiera toda la temporada pasada a causa de una lesión en el ligamento cruzado de su rodilla.