Una insólita situación ocurrió en la sexta división del fútbol inglés, donde un arquero recibió la cartulina roja por orinar en pleno partido.

Se trata de Max Crocombe, quien defiende los colores del Salford City.

En el minuto 87, cuando su equipo se medía ante el Bradford Park Avenue, el juez decidió expulsar al guardameta porque no se aguantó las ganas de ir al baño.

“¡Tarjeta roja! Esto es bizarro. Max Crocombe, portero del Salford, fue expulsado. Podemos confirmar que Crocombe ha sido expulsado por orinar sobre el césped durante el partido. No estamos bromeando”, publicó la cuenta de Twitter del Bradford Park Avenue.

Tras la tragicómica situación, el neozelandés de 24 años utilizó las redes sociales para disculparse por lo sucedido.

“Me gustaría disculparme sinceramente por mi incidente. Estaba en una posición incomoda y cometí un error de juicio que ha estropeado una gran victoria. Mi intención nunca fue ofender a nadie y me gustaría pedir disculpas a ambos clubes y grupos de seguidores”, confesó.

Sin embargo, la expulsión del portero no perjudicó demasiado a su equipo, que terminó ganando 2-1 el encuentro.