Varios ciclistas se fueron al suelo en pleno esprint el domingo en la primera etapa del Tour de la isla de Reunión luego de que un espectador, padre de un corredor, lanzase una valla al asfalto con el objetivo de provocar la caída.

Un joven espectador y varios corredores resultaron heridos.

Mientras la imagen daba la vuelta al mundo a través de las redes sociales, el causante fue detenido por la policía.

El infractor es el padre del ciclista Jonathan Boyer (Sainte-Marie Vélo Club La Réunion), que se había caído unos kilómetros antes. Después de pedir que se detuviese la carrera, sin obtener respuesta positiva, lanzó sobre la calzada dos barreras de seguridad provocando la caída del pelotón.

Seis corredores se fueron al suelo y resultaron heridos. Uno de ellos sufrió una fractura de las costillas.

Los organizadores decidieron no contabilizar los tiempos de esta primera etapa.