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ROG Ally: la consola de Asus que tiene todo para convencer a los fans del PC gamer... menos la batería

30 agosto 2023 | 17:43

BiobioChile tuvo acceso a la nueva consola ROG Ally de Asus y estas fueron las primeras impresiones.

Hace pocos días llegó al mercado chileno la ROG Ally, una nueva consola de Asus que mezcla lo mejor del PC y de XBox en un dispositivo pequeño y muy portátil. Básicamente, un mini PC gamer, tan rápida como uno y con gráficos que no dejan nada que desear, excepto por un detalle.

Pero primero lo bueno. Cuando en febrero de 2022 se estaba lanzando la Steam Deck, nadie pensaba que después existiría una competencia específica para ella, porque hasta el momento nada ha superado a la Nintendo Switch en cuanto a consolas, y entre este formato de PC y un notebook gamer, si hablamos de portabilidad, se vende más lo segundo.

Sin embargo, un año después Asus estaba anunciando su propio equipo, una consola con la interfaz y la potencia de un PC, con un diseño similar al de Xbox y mucho “hype”, considerando que la compañía es líder en el área gaming y tiene incluso su propia línea para gamers profesionales: Republic of Gamers (ROG), de la que proviene la ROG Ally.

Se puede decir que es la versión aún más portátil de un notebook gamer, y está bien, porque la sociedad está en una era de la portabilidad, por así decirlo. Pero pese a que tiene esta utilidad, es un dispositivo para un público muy focalizado, o da esa impresión.

Su precio en Chile en la tienda original son $769.990 pesos, mientras que en el retail a la fecha casi alcanza los $900.000, un valor muy comparable a un notebook gamer promedio y no tan accesible para ser una consola portátil.

Además, la inversión no es para nada igualable a la de una Nintendo Switch, que es la consola portátil más vendida del momento, sin superar los $400.000 pesos y que incluso cuenta con una versión “veta”, que cuesta casi la mitad. La ROG Ally, por decirlo de una forma, es especial, y quienes la compren lo harán sabiendo.

La ROG Ally tiene mucha diversidad

La mejor de la ROG Ally es que evidencia en su máximo esplendor la evolución del hardware, porque toda la potencia quedó reducida en algo que los usuarios podrán llevar en una mano a todas partes, demostrando que el tamaño, ya no limita la capacidad.

Y es que con chips de bajo consumo y pequeños procesadores a baja temperatura, ahora corren sin problema videojuegos triple A, algo que antes era impensable. Alguien que quiere dejar atrás un PC gamer de muchas piezas o un notebook grande y pesado, puede pensar en esta alternativa.

En la misma línea, comparada con la Nintendo Switch que es la que predomina hoy, los juegos de PC para la ROG Ally no tendrán que ser adaptados a una versión de consola, porque todo el potencial de Windows ya está allí para explotarse. Hay una mayor compatibilidad.

De hecho, la Switch es número uno porque un dispositivo portátil de juegos era algo que técnicamente sólo Nintendo podía hacer, considerando que inicialmente tenía juegos exclusivamente diseñados para funcionar en procesadores que no requerían tanta capacidad y con un sistema operativo especial para ese formato.

Pero la ROG Ally, sería 3 en uno, un PC, una Xbox y una consola portátil, considerando que puede conectarse a un monitor y usarse como un computador o a un televisor para jugar como si fuera una XBbox, aunque sin controles extraíbles como la Switch.

ROG Ally: la consola de Asus que tiene todo para convencer a los fans del PC gamer... menos la batería

Por otro lado, si profundizamos en otras de su tipo, como la Steam Deck, la Onexplayer 2 o la Aya Neo 2, que también tienen lineamientos de PC, la ROG Ally es la más potente. Una generación por delante con su procesador Ryzen Z1 7000 hasta 5.1 GHz.

Pese a ello tienes otros aspectos que pudieron ser mejores, por ejemplo, la memoria RAM, de 16 GB, no es expandible, mientras que la de almacenamiento solamente alcanza poco más de 500 GB, expandible hasta 1TB.

Lo ideal era no tener que expandirla considerando que es un dispositivo para descargar juegos. Pero esto último puede tener que ver también con que Asus quiere que sus usuarios accedan a otros complementos de su amplio ecosistema, una estrategia. Lo mismo pudo ocurrir con los controles, que no son extraíbles, por ejemplo.

Además, al ser de la línea ROG se entiende que es un dispositivo bastante configurable para que los usuarios maquinen a su gusto las capacidades que tiene.

Cosas no tan buenas de la ROG ALLY

Si bien, una consola portátil con sistema operativo Windows, tiene varias ventajas y es compatible con todas las plataformas de videojuegos para PC, su interfaz no es tan buena o más bien su funcionalidad no es limpia. Aquello puede molestar a un gamer.

Por ejemplo, consolas como la Steam Deck, tienen su propia interfaz y las acciones, como abrir, cerrar o comprar un juego son bastante directas, pulsas el botón y la consola trabaja. Pero en la ROG Ally, al ser Windows, pareciera que las cosas funcionan en capas.

De hecho, la consola de Asus tiene una especie de biblioteca que podría funcionar como su interfaz propia, o el “modo consola” y no “modo windows”, por ilustrarlo de alguna forma. Pero al abrir un juego desde allí, se abren más ventanas, se abre la plataforma desde donde descargamos el juego y a veces esto provoca que se ralenticen los procesos (y la paciencia).

Por otro lado, al ser Windows y touch a la vez, no es muy compatible para personas con manos grandes, que al presionar los botones de Windows no logran precisión. Esto también hace que configurar los controles no sea tan intuitivo al tener “modo PC” o modo controles. Puede que a algunas personas les cueste adecuarse.

En cuanto a ventilación, podemos decir que es un poco ruidosa, contrario a la publicidad que ofrece Asus, pero es destacable que no se sobrecaliente pese a varias horas de juego, incluso enchufada. Recordemos que los sistemas de ventilación son parte del sello de la marca y en la ROG Ally está bastante bien logrado.

Mientras que el diseño, no hay nada malo que decir, excepto por los botones traseros, una novedad en las consolas con la que Asus decidió experimentar y que, en realidad, no tienen mucho sentido. ¿Para qué se usan?

Si bien son configurables, los usuarios de consolas están acostumbrados a L y R, no hay razón por la que los cambiarían y acostumbrarse a ellos puede ser difícil. Además, es fácil presionarlos sin querer e interrumpir en el acto la función de otro botón, que puede incluso hacer que el usuario pierda una partida.

ROG Ally: la consola de Asus que tiene todo para convencer a los fans del PC gamer... menos la batería

El detalle que marcó la diferencia

Lamentablemente, entre lo bueno y lo malo, sobresale la duración de la batería. En BiobioChile se probaron juegos de distintos rendimientos, con distintas configuraciones y no hubo mucha diferencia.

La ROG Ally tiene 3 configuraciones de rendimiento, modo turbo, modo rendimiento y modo silencioso, que permiten maniobrar sus capacidades. En modo turbo se puede aprovechar el juego al máximo, pero bajando a rendimiento o silencioso, se limitan algunos aspectos.

Jugando, por ejemplo, Hollow Knight en modo turbo, la batería dura poco más de una hora sin pausas, casi dos, aún cuando este juego no pide demasiados requisitos. Con Forza, por otro lado, dura una hora y pocos minutos.

La batería no es suficiente para instancias como un viaje largo sin acceso a enchufes, que hubiera sido lo ideal, por lo que para gamers que dedican horas de juego, no es tan práctica. Pese a ello se entiende la idea de que un gran potencial, a veces, requiere sacrificios.

Recapitulando, podríamos decir que la ROG Ally es para gamers que buscan una experiencia muy personalizable o alternativas al notebook gamer, no siempre más económicas. Aunque existen notebooks gamers de Asus que rinden hasta 6 horas de batería realizando tareas pesadas.

Quizás tendrá un alcance o accesibilidad como la Nintendo Switch, que básicamente podría usar cualquiera, pero sí cautivará a los más adeptos y es una buena primera propuesta. Recordemos que el mundo de los PC en formato consolas está “en pañales” y todavía todo puede pasar.