En Inglaterra alertaron de un nuevo método de robo al descubrió a tres hombres que lograron vulnerar la seguridad de cinco vehículos. Para ello emplearon uno dispositivo portátil que simulaba ser una Nintendo Game Boy que les permitía acceder a las funciones del auto.
Según la información compartida por la BBC, la banda de ladrones, identificados como Dylan Armer, Christopher Boews y Thomas Poulson lograron robar cinco automóviles. Dichos robos alcanzaron la importante suma de 180 mil libras, aproximados 200 millones de pesos chilenos.
Una “inofensiva” replica de Nintendo
El modus operandi se trató de un pequeño dispositivo “Sup” que emula una Nintendo Game Boy. Sin embargo, en este caso estaba modificado con otro sistema y hardware para desbloquear y hacer arrancar un coche si.
La policía de West Yorkshire dijo que el dispositivo estaba valorado en 20.000 libras, unos aproximados 22 millones de pesos chilenos.
Los hombres rápidamente fueron encarcelados en Leeds Crown Court. Esto luego de ser declarados culpables de “conspiración para robar”.
El procedimiento habría sido identificados luego de haber sido vistos por las cámaras de seguridad. Allí, lograron captar cómo fue que evadieron el sistema de los vehículos.
Los oficiales encontraron el dispositivo estilo Game Boy escondido en un compartimiento secreto en el vehículo que se transportaba la banda.
Según declararon las autoridades, este robo se debió tratar de un crimen planificado y organizado ya que debió ser necesario una inversión importante para comprar el sofisticado dispositivo utilizado para robar.
Total desprecio a sus victimas
En el smartphone de Poulson encontraron videos y fotos de cómo lo hacían. Además de comentarios de los criminales burlándose de “lo rápido y fácil que era tener acceso completo a los autos”.
La detective Vicky Vessey compartió a la BBC que los tres hombres habrían traído “angustia, trauma e inconvenientes a todas las victimas afectadas por sus crímenes”.
“El desprecio absoluto que tenían por las víctimas, cuyos vehículos duramente ganados fueron llevados en segundos, es totalmente evidente por el tono frívolo que se escucha en las imágenes de vídeo que recuperamos de uno de sus teléfonos”, señaló.
Armer fue encarcelado por 30 meses, mientras que Poulson y Boews recibieron 22 meses de prisión cada uno.
