Si ya has jugado Watch Dogs o su secuela (Watch Dogs 2), entonces ya sabes lo que te espera en esta tercera versión. Watch Dogs Legion sigue la línea en esta franquicia que ofrece jugabilidad en tercera persona, en un mundo abierto donde las posibilidades y actividades que podemos realizar son casi infinitas.

Estamos ante una nueva iteración de Watch Dogs que no innova mucho, pero que aún así sigue siendo un juego muy entretenido por su ambientación distópica, con elementos cyberpunkeanos y ese tipo de jugabilidad que puede volverse muy adictiva si es lo que buscas (por todo lo que hay para hacer).

En ese sentido, es un juego muy Ubisoft. Tal como podemos ver en los Assassins Creed o Far Cry, Watch Dogs Legion invita a abordar cada misión de la forma que tu prefieras y en su corazón hay una historia que puedes completar si así lo deseas (ambos aspectos que, en lo personal, me gustan mucho).

Sin compromisos ni reservas, esta es la reseña de BioBioChile.

De viaje a un Londres sumido en las tinieblas

En esta ocasión, Watch Dogs nos lleva a Londres (Watch Dogs 1 y 2 fueron en Chicago y San Francisco, respectivamente), por lo que estamos en un nuevo país: nuevos acentos, arquitectura distinta, calles y tránsito diferentes, entre muchos otros.

Lo que no ha cambiado mucho es la historia, que sigue siendo sobre conspiraciones, villanos megalomaníacos que aspiran por tener el control y poder del país, además de la presencia de nuevas tecnologías poco éticas que ponen en riesgo la población.

El Big Ben en Watch Dogs Legion

En el medio de todo estás tú como protagonista, pero esta vez no de forma individual. Legion innova en esta oportunidad y el protagonista que controlaremos es el grupo de hackers DedSec como un todo. Antes habíamos siempre controlado a una persona específica, pero esta vez tendremos que preocuparnos de reclutar miembros, hacerlos mejores y así crear una comunidad de hackers que luchan por la libertad de Londres.

Lo genial es que, técnicamente, podemos reclutar a cualquier personaje que veamos por las calles de Londres lo cual puede llevar a crear un equipo diverso y con mucha personalidad. Es un sistema que funciona muy bien, pero que consume mucho tiempo, ya que cada vez que queramos reclutar a un nuevo miembro deberemos hacer una misión específica. Aún así, es fantástico generar una relación más cercana con los personajes al ser uno como jugador quien los escoge y personaliza.

Se alcanza a ver en el fondo el “London Eye”, en Watch Dogs Legion

Lo más llamativo es que, independiente de los personajes con los que juguemos, estos estarán integrados en el modo historia, en las cinemáticas y conversaciones con villanos. Es algo muy interesante, pero que funciona con doble filo, ya que para tener tantos personajes, con voces incluidas, estas últimas no son muy buenas y las actuaciones dejan mucho que desear en varias ocasiones. Adicional a esto, la sincronización de voces con los rostros y labios de los personajes es muy por debajo del standard al que estamos acostumbrados.

Fuera de ello, la historia es servicial (cerca de 20 horas de juego) para mostrarnos cada esquina de este hermoso Londres que Ubisoft ha logrado desarrollar. En ningún caso nos sorprenderá demasiado, y por lo menos para mí no fue memorable, pero cumple con ser chistosa, muy ligera, con vuelcos, y con elementos muy exagerados para disfrutar. En ningún caso intenta ser algo realista y por ello es mejor para el videojuego como tal.

En cuanto a la jugabilidad, podemos esperar lo que ya es tradicional en esta franquicia: combate armado, combate sigiloso, habilidades para hackear semáforos, vehículos, muchos puzzles, conducción de automóviles a alta velocidad, entre otros. Todo esto con la posibilidad de hacer muchísimas misiones y de coleccionar muchísimos objetos que nos harán más fuertes o nos permitirán conocer más la historia.

Al igual que sus precuelas, Legion es muy entretenido por todas las posibilidades que ofrece al jugar y es el elemento que lo hace más “adictivo”; tal como es costumbre en los juegos de Ubisoft.

Legion con Ray Tracing

Dejando de lado la historia y la jugabilidad, que son muy similares a lo que ya hemos visto en las precuelas, Watch Dogs Legion es un nuevo salto en gráficos en la franquicia; una que ha sido famosa desde su génesis por el aspecto visual y que ha ido mejorando en cada versión.

Legion no es excepción, siendo un juego muy exigente en cuanto a gráficos en su versión de PC. En esta ocasión, hemos podido probar la versión para Xbox Series S y pudimos verificar que el Ray Tracing funciona sin problemas, a 30 FPS constantes. La experiencia gráfica, pese a estar atada a una resolución de 1080p (ampliada a 4K), es muy buena considerando el hardware y los reflejos en vidrios y ventanas son cosas que en la antigua generación no habíamos visto.


Así se ven los reflejos Ray Tracing en la Xbox Series S.

Londres se ve increíble por lo mismo, lleno de detalles, partículas, edificios emblemáticos, luces de neón al anochecer, iluminación dinámica a medida que avanza el día, entre muchos otros. Ubisoft sigue sacando máximo provecho a este motor gráfico y es un gusto jugar Watch Dogs Legion. También pudimos probarlo para PS4 y, aunque sin Ray Tracing, el juego sigue aguantando muy bien. Por supuesto que la mejor versión en cuanto a gráficos será en PC, pero para eso tendremos que tener el hardware necesario.

Una muy buen experiencia, mermada por bugs

El único punto realmente negativo que he podido encontrar en mi experiencia con Watch Dogs Legion fue un bug que me hizo perder mi progreso en variadas ocasiones.

Legion tiene un sistema de autoguardado, por lo que cada vez que realizamos una misión o viajamos a algún punto de la ciudad el juego va guardando tu progreso.

Sin embargo, fui víctima de un bug que a varios usuarios les ha estado ocurriendo durante los últimos días y que aún no tiene solución: el juego eventualmente deja de guardar, sin dar aviso alguno, y al finalizar nuestra sesión perderemos todo el progreso (que en mi caso han sido horas y horas).

Se trata de un bug muy frustrante que tuve que aprender a evadir con un método muy poco convencional, pero que sin dudas hizo que la experiencia decayera un poco. Respecto del bug, Ubisoft se supone que está al tanto. En mi caso me afectó en la Xbox Series S y desconozco si en otras plataformas se ha repetido.

Pese a ello, Watch Dogs Legion es un juego tan entretenido que me sobrepuse a la situación y logre finalizarlo, con cerca de 30 horas de juego totales.

Finalmente, para quienes les sea de interés, Legion también tiene un modo multiplayer que se supone debutará durante diciembre. Por lo mismo, no hemos podido revisar su funcionamiento para esta reseña.

Veredicto

Watch Dogs Legion es más de lo mismo para quienes conocen la franquicia, con algunas pequeñas innovaciones que permiten más personalización y una conexión más fuerte con los personajes principales. El motor gráfico sigue dando frutos, con un mundo abierto hermoso, detallado y que muestra a un Londres con edificaciones simbólicas pero en tinieblas. Es un juego Ubisoft 100% y en eso no hay nada malo, pero no hay mayores novedades aquí. Además, el “bug del guardado” ha significado una experiencia un poco frustrante, pero aún así puedo recomendar este juego, por su precio, para quienes sean fanáticos de la franquicia y para quienes disfrutan de los juegos mundo abierto donde todas las posibilidades están, literalmente, en tus manos.