Son muchas las historias las que protagonizó a lo largo de su vida el prestigioso físico Stephen Hawking.
El británico, quien falleció la madrugada de este miércoles a los 76 años, fue conocido por sus brillantes ideas e investigaciones, las que le hicieron ganar admiradores desde todos los ámbitos.
Un ejemplo que grafica perfectamente su genial personalidad es lo ocurrido el 28 de junio de 2009, cuando organizó una elegante fiesta a la que nadie llegó.
Tal como reconoció el propio Hawking en el capítulo “Viaje del tiempo” de la serie documental Into the Universe with Stephen Hawking, en el evento unió dos de sus cosas favoritas: los experimentos simples y la champaña.
De esta manera, uno de los salones de la Universidad de Cambridge, Inglaterra, fue decorado especialmente para la ocasión, instalándose una mesa con diferentes bebidas en la que no podía faltar su preferida.
¿Su objetivo? Comprobar si los viajes en el tiempo del futuro al pasado eran posibles. Para probar esta idea, el físico envió las invitaciones, con la fecha, hora y lugar de la fiesta, recién cuando ésta terminó.
“Usted está cordialmente invitado a la recepción para los viajeros del tiempo, organizada por el profesor Stephen Hawking”, decía la tarjeta, según recoge el sitio Vine Pair.
“Será celebrada en el pasado”, aclaraba el mensaje, finalizando con una irónica aclaración: “No necesita confirmar su asistencia”.
Dentro del abanico de posibilidades, Hawking tenía la esperanza de que las invitaciones sobrevivieran por varios miles de años.
“Quizás, algún día, alguien viviendo en el futuro va a encontrar la información y usará una máquina del tiempo para venir a mi fiesta, probando que, un día, los viajes en el tiempo serán posibles”, explicaba.
Luego de comprobar que nadie llegó a su fiesta, Hawking sacó a relucir su característico humor, señalando: “Esperaba que la futuro Miss Universo cruzara por esta puerta”.
Tres años después, el astrofísico recordó su “fallida” gala. En el marco del Festival de Ciencia de Seattle, Estados Unidos, sostuvo que “la teoría de la relatividad general de (Albert) Einstein parece ofrecer la posibilidad de que podamos deformar el espacio-tiempo tanto que podríamos viajar al pasado“.
No obstante, explicó que además era probable que esta deformación podría provocar un rayo de radiación “que destruiría la nave espacial y tal vez el espacio-tiempo en sí mismo”.
Fue entonces cuando se refirió a su fiesta: “Estuve allí mucho tiempo esperando, pero nadie vino”.
Nacido el 8 de enero de 1942, 300 años después de que muriera el padre de la ciencia moderna, Galileo Galilei, Stephen William Hawking se convirtió en uno de los científicos mejor considerados del mundo y entró en el panteón de los titanes de la ciencia.
Gran parte de sus trabajos se centraron en unir la relatividad (la naturaleza del espacio y del tiempo) y la teoría cuántica (la física de lo más pequeño) para explicar la creación y el funcionamiento del cosmos.
