La sonda china enviada a una zona inexplorada de la Luna ha terminado de recoger muestras de suelo lunar y se dispone a traerlas a la Tierra, anunció este jueves la agencia espacial nacional.

La sonda Chang’e 5, que llegó el martes al astro lunar, cargó sus muestras en un contenedor especial, tal como estaba previsto. “La operación de prospección científica se desarrolló según lo programado”, informó la agencia espacial sin entrar en detalles.

El objetivo de la misión es traer unos 2 kilos de rocas perforando el suelo hasta dos metros de profundidad. Una vez analizadas por los científicos contribuirán a explicar la historia lunar.

Las rocas deberían llegar antes de mediados de diciembre a la Tierra, en Mongolia Interior (norte de China).

Si el regreso a la Tierra se desarrolla sin problemas, China se convertirá en el tercer país en traer muestras de la Luna, después de Estados Unidos y la antigua Unión Soviética.

El último intento fue soviético, con la misión deshabitada Luna 24 llevada a cabo con éxito en 1976.

La televisión pública china CCTV describió el miércoles a Chang’e 5 como una de las operaciones “más complicadas y delicadas” del programa espacial nacional.

Esta ambiciosa operación permitirá igualmente al gigante asiático probar nuevas tecnologías, cruciales para enviar astronautas al astro lunar de aquí a 2030.

Chang’e 5 fue lanzada el 24 de noviembre desde la isla tropical de Hainan (sur de China).