La Agencia Nacional de Aeronáutica y el Espacio (Nasa, por su sigla en inglés), anunció este lunes que uno de los cráteres más grande del planeta Marte, hace 3.500 millones de años, era un gran lago.

Se trata de la zona conocida como Jezero, ubicada al norte del ecuador marciano, en la región de Isidis Planitia, y que tiene unos 45 kilómetros de diámetro.

A través de un artículo, la institución estadounidense publicó una ilustración que muestra cómo habría lucido el lugar en aquellos tiempos. También se ve una entrada y salida de agua a ambos lados.

Ilustración de la Nasa

La agencia espacial escogió el cráter Jezero como zona de aterrizaje para el vehículo no tripulado Perseverance, que fue lanzado en julio de 2020. Los científicos ya creían que el área alguna vez estuvo inundada de agua.

“El cráter Jezero cuenta la historia de la naturaleza intermitente del pasado húmedo de Marte. Hace más de 3.500 millones de años, los canales de los ríos se derramaron sobre la pared del cráter y crearon un lago”, dicen desde la Nasa.

“Los científicos ven evidencia de que el agua transportó minerales arcillosos desde el área circundante hasta el lago del cráter. Posiblemente, la vida microbiana podría haber vivido en Jezero durante uno o más de estos tiempos húmedos. Si es así, se pueden encontrar signos de sus restos en el lecho del lago o en los sedimentos de la costa”, agregan.

Uno de los objetivos de Perseverance es la astrobiología. El vehículo deberá entregar antecedentes sobre la geología del planeta y datos sobre su pasado. Esto, con el próximo gran salto espacial: la llegada del hombre a Marte en 2030.