Ya se nos ha informado bastante sobre el estallido de protestas en Estados Unidos, con incidentes de mucha violencia, luego del asesinato de un hombre negro, George Floyd, por las bestiales torturas que le aplicó el policía blanco Derek Chauvin mientras lo sostenía en el suelo, presionándole la garganta con una rodilla durante 8 minutos, pese a que Floyd le suplicaba diciendo que ya no podía respirar.

Junto a ese torturador había otros tres policías que, sin intervenir, contemplaban con indiferencia la acción criminal.

George Floyd había sido detenido por sospechas de que hubiera pagado una compra de supermercado utilizando un billete de 20 dólares, falsificado. ¡20 dólares! En fin. Se cuenta que a Jesús lo traicionó Judas por 30 monedas de plata, o sea, unos 525 dólares al precio actual de la plata.

Bueno, a los 5 policías involucrados ya los expulsaron, y a Chauvin lo tienen preso, acusado de asesinato, por supuesto. Y en todo Estados Unidos estalló el grito de “Sin justicia no puede haber paz”.