La cualidad lúdica recorre esta propuesta de principio a fin, entremezclándose con la nostalgia y esa corriente de sencilla calidez en las relaciones humanas directas que, de alguna manera, ha sido opacada por la tecnología.

Tomar un papel y un lápiz, pensar un poco y ponerse a escribir; después, meter la página en un sobre, cerrarlo, pegarle una estampilla y salir a la calle para echarlo en un buzón amarillo o en la oficina de Correos… es un ejercicio casi de museo.

Tal vez por eso, y en oposición al pragmatismo de internet, la obra “Correo” da la posibilidad de rememorar y/o revivir esa práctica comunicativa ancestral, a través de la palabra escrita, además de emerger como una innovadora, interesante y entretenida iniciativa escénica.

Lo personal y colectivo

Un rincón de la intimidad personal se visita cuando se vive la experiencia de escribir una carta. Sin embargo, la obra propone que este ejercicio también implica una vocación comunitaria y viajera, de querer compartir, llegar a un destinatario, como también de espera y ansiedad.

La propuesta, escrita por Paula Aros (también directora del montaje) y Tomás Espinosa, llega al escenario como un hecho real, en vivo, y con convocatorias permanentes al público.

"Correo" | GAM
“Correo” | GAM

Cuatro integrantes del ficticio Archivo Mundial de Misivas decidieron contar, mostrar, leer e interpretar ante el público el contenido de diversas cartas que han sido recopiladas.

La idea es seguirle la pista a esos textos e intentar saber desde dónde habla quién escribe, qué buscan y cuáles son o podrían ser las consecuencias de traspasar al papel ciertas convicciones, dudas, deseos u objetivos.

Entre quienes suscriben estas misivas hay gente corriente, pero también nombres famosos en la historia nacional y mundial: algunas son escrituras formales, otras más sueltas, de agradecimiento, interpelaciones…

Pero, tal vez, lo más atractivo es cómo Paula Aros (“Dr. Mortis“, “Home“) transforma un tema sobre la memoria –muchas veces presentado como algo denso, intelectual y museológico- en una entrega vivaz que se apoya en el alma humana y en las conexiones entre lo racional del pensamiento y aquellas emociones que hacen temblar el pulso al momento de escribir.

Y, por supuesto, ocupan un lugar importante los recursos escénicos que se utilizan, desde el diseño sonoro con personalidad propia de Daniel Marabolí, la escenografía de Claudia Yolín (mesa de conferencia simulando casillas de correo), hasta la convocatoria al público para que participe escribiendo un texto sobre un tema que se propone o recibiendo una carta, escrita previamente.

La directora va moviendo todo este material a un ritmo dinámico, de modo que cada elemento y recurso va renovando el interés por saber lo que va a ocurrir a continuación en escena, siempre con sentido y como un juego cercano a la gente.

C. C. Gabriela Mistral (GAM)
Alameda 227
Jueves a sábado, 20.30 horas.
Entrada general $ 4.000;
estudiantes y tercera edad $ 3.000.
Hasta el 15 de Abril.