La salud en Chile: Una deuda pendiente


Las listas de espera en salud son una constante fuente de conflicto político; se habla y se escribe sobre ellas; vemos reportajes; se crean comisiones investigadoras y, sin embargo, el problema continúa.

El Ministerio de Salud informaba que en diciembre de 2016, 1.569.615 personas se encontraban en lista de espera por una consulta de especialidad, mientras que 264.330 personas esperaban por una intervención quirúrgica[1]. Posteriormente, el país fue testigo de los debates generados sobre una relación entre las listas de espera y muerte de pacientes; así como de la constatación por parte de la Contraloría General de la República de la eliminación artificial de esos registros, con el fin de mostrar números exitosos en la gestión de las listas.

Detrás de esos números fríos e impersonales, se esconden las historias de vida de miles de personas que diariamente acuden a centros de salud pública a lo largo de todo Chile para ser atendidos. Son niños, mujeres, adultos mayores y hombres, que necesitan apoyo para enfrentar sus enfermedades y dolores y el Estado, en su conjunto, más allá de los colores políticos de los gobiernos, les ha fallado.