Los fanáticos más peligrosos de la historia

No es casualidad que Bachelet haya sido poco menos que una geisha del Partido Comunista en todo su Gobierno. Ese partido es, para los que no lo saben, el que más militantes tiene en Chile, y el primero que consiguió las firmas a propósito del refichaje. Ahora, uno podrá considerar obsoleto el modelo político de los comunistas (y el de la extrema izquierda, en general), uno podrá también demostrar con cifras (y con evidencia histórica) su vocación de fracaso.