En qué consiste el proyecto que pone fin al CAE y crea el FES: este miércoles se vota en el Congreso

Este miércoles, la Cámara de Diputadas y Diputados votará el proyecto que pretende dar fin al CAE, de la mano de la creación de un nuevo instrumento de Financiamiento público para la Educación Superior, abreviado como ‘FES’.

Además de esta alternativa de financiamiento, la iniciativa incluye la condonación de las deudas educativas por CAE, Fondo Solidario y Corfo.

En una primera instancia, la Sala debatirá la idea de legislar y, de aprobarse las indicaciones, el proyecto continuaría su tramitación al Senado.

Sin embargo, antes de que inicie la votación, ya se prevé una discusión compleja tras el paso por las comisiones de Educación y Hacienda, ya que algunos artículos aprobados en una instancia fueron rechazados por la otra.

En ese sentido, la oposición ya anunció su rechazo a gran parte de la iniciativa, argumentando que la iniciativa afecta la autonomía universitaria, impone cargas excesivas a estudiantes de clase media y compromete de manera incierta las finanzas públicas.

Por su parte, el oficialismo busca evitar enviar un “cascarón” al Senado, como ocurrió con la reforma de pensiones, resolviendo el fondo del proyecto en la Cámara.

¿De qué forma se buscará poner fin al CAE?

Tal como mencionábamos, el proyecto contempla dos partes, un mecanismo para condonar las deudas educativas y un nuevo instrumento para financiar la educación superior.

En el primer caso, el plan considera tres tipos de condonación: inicial, mensual y por pago anticipado.

La condonación inicial abarca a todos quienes adscriban al plan, teniendo en cuenta su condición académica, ya sea que hayan egresado o interrumpido sus estudios; su situación de pago, si están al día o en mora; y el número de cuotas pagadas del crédito respecto al plazo total.

Para este grupo se establecieron cuatro perfiles de condonación, dependiendo de su situación con el pago de cuotas, pudiendo ser de 20, 30, 40 o 60 UF ($785.160, $1.177.740, $1.570.320 o $2.355.480). Este monto base debe multiplicarse por las cuotas pagadas, dividido por las cuotas totales, más 1. El resultado dará la condonación inicial que se restará a la deuda total.

El proyecto plantea que si tras la condonación inicial el valor de la deuda es cero, entonces la deuda se dará por terminada. Quienes queden con saldo pendiente, accederían a una condonación mensual, exclusiva para quienes tengan ingresos superiores a $500.000 a octubre de 2024, cuyo monto equivale a un 8% de sus ingresos percibidos.

La tercera alternativa, de condonación por pago anticipado, propone que las personas tengan la oportunidad de pagar lo restante de su deuda luego de la condonación inicial, recibiendo consigo una rebaja del 25% del total.

Además de lo antes señalado, la iniciativa que busca dar fin al CAE considera a las personas que están al día en el pago de sus cuotas. Para ellos se contempla una rebaja del Impuesto Global Complementario o Impuesto de Segunda Categoría, que será de 4 UF anuales para egresados y 6 UF en caso de no haber terminado sus estudios ($157.032 y $235.548). El beneficio se extenderá por 20 años.

¿Qué propone el FES?

De acuerdo con el Ministerio de Educación, el Financiamiento público para la Educación Superior, o FES, no generará una deuda para los estudiantes que lo utilicen, ya que no contempla préstamos bancarios, ni tasas de interés, tampoco requiere que los estudiantes cuenten con un aval o garantía para su asignación.

El FES cubriría la duración formal de la carrera y un año adicional, permitiendo un único cambio de carrera. En ese sentido, la cobertura incluye el arancel, al igual que la matrícula. Ambos beneficios son aplicables hasta el noveno decil de ingresos. Por lo cual, las casas de estudios podrán cobrar montos adicionales a quienes se ubiquen en el décimo decil.

Además, no exigirá cumplir con requisitos económicos ni puntajes PAES para que se otorgue, sin embargo, los estudiantes tendrán que matricularse en instituciones adscritas y comprometerse a retribuirlo tras ingresar al mercado laboral.

Quienes tengan ingresos inferiores o iguales a 7,5 UTM ($514.852), estarán exentos de pago. Distinto es el caso de aquellos que superen esa cifra. Para ellos, la retribución sería del 8% del ingreso mensual “bajo la regla de dos años de contribución por semestre cursado, por un plazo máximo de 20 años”, propone el proyecto.

Asimismo, se comenzaría a pagar 12 meses después del egreso, deserción o la eliminación académica, y se realizaría mediante la Operación Renta, “previo descuento mensual por planilla para trabajadores dependientes, y retención aplicada a boleta de honorarios en el caso de trabajadores independientes”.