Con un llamado urgente a crear conciencia turística para la protección del patrimonio natural y cultural del país, el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN), la Dirección de Bibliotecas Archivos y Museos (DIBAM), Empresa Ferrocarriles del Estado (EFE) y la Policía de Investigaciones (PDI) lanzan el concurso y la campaña “Cuida tu amor de verano”, enfocada a sensibilizar a la población.

La iniciativa consiste en enviar una fotografía tipo “selfie” junto a un Monumento Nacional como Zona Típica, Monumento Histórico o Santuario de la Naturaleza, explicando en un máximo de 200 palabras cómo fue ese “flechazo” o “amor a primera vista” hacia ese patrimonio.

Monumento Histórico “Puente Confluencia” en Chillán |Consejo de Monumentos Nacionales
Monumento Histórico “Puente Confluencia” en Chillán |Consejo de Monumentos Nacionales

Una vez enviada la fotografía y el relato a difusion@monumentos.cl, se publicará en el Facebook del Consejo de Monumentos Nacionales. Luego, las ocho mejores fotografías ganarán un viaje al Patrimonio Mundial Sewell y una ruta por el Tren del Recuerdo de la Empresa Ferrocarriles del Estado.

Según explica Angel Cabeza, Director de la Dibam y Vicepresidente del Consejo de Monumentos Nacionales, “es justamente en verano cuando más conocemos y nos enamoramos de nuestros Monumentos Nacionales, Zonas Típicas, Monumentos Históricos y Santuarios de la Naturaleza, pero es también cuando más la ciudadanía los daña, causando un perjuicio irreparable para nuestra historia. Precisamente, por ello deseamos que ese amor que nace en verano perdure y lo cuidemos permanentemente”.

Desafortunadamente 7 de nuestros monumentos nacionales fueron dañados tras los recientes incendios y ahora en época de verano más que nunca las zonas afectadas por esta catástrofe necesitan del turismo. Aún nos queda mucho verano y necesitamos tener turistas conscientes con nuestra herencia cultural y natural, para no lamentar pérdidas irreparables”, acota Ana Paz Cárdenas, Secretaria Técnica del Consejo de Monumentos Nacionales.

Algunos de los casos con más connotación pública fueron los recientes rayados de dos jóvenes norteamericanos a un muro de piedra en el Fuerte Niebla; la estampida de lobos marinos provocada por una invasión de turistas al Santuario de la Naturaleza de Cobquecura; los rayados en la Iglesia de San Pedro de Atacama estando recién remodelada hace un año atrás; o la comercialización de amonites en joyas, durante el verano de 2013, entre otros.

La ley contempla sanciones que van desde los dos a los nueve millones de pesos. El llamado del Consejo de Monumentos Nacionales es uno: que la apreciación de la herencia cultural y natural y el interés de preservarla se traspase de generación en generación.