El exgerente financiero de Alanis Morissette fue condenado a seis años de prisión después de admitir que le robó millones de dólares a la cantante de rock engañándola respecto a sus finanzas.

Jonathan Schwartz, que trabajó para una prominente firma del área de Los Ángeles, GSO Business Management, también deberá pagar 8.657.268 dólares como restitución, según una sentencia de un juez federal anunciada la noche del miércoles.

Morissette, quien estaba presente en la audiencia de sentencia, dijo que Schwartz actuó de “forma prolongada, calculada y siniestra”, y acabó con sus sueños de poder centrarse en su familia y sus causas.

Schwartz admitió que robó 4,8 millones de dólares a Morissette entre 2010 y 2014, catalogando los retiros que hacía como gastos personales de la cantante mientras le aseguraba que sus finanzas eran sólidas.

Al ser confrontado, Schwartz reconoció que mintió diciéndole a Morissette que estaba invirtiendo su dinero en el floreciente negocio de la marihuana.

Schwartz, un contador público certificado, también admitió haber robado 1 millón de dólares a otro cliente bajo el argumento de remodelaciones en la casa, así como 737.500 dólares a un tercer cliente cuya firma falsificó en recibos.

Deirdre Fike, asistente de dirección de la oficina del FBI en Los Ángeles, dijo que Schwartz “usaba los fondos de sus clientes como un cajero automático personal” y prometió que la oficina seguiría investigando esos delitos.

“Las personas tienen derecho a sentirse seguras cuando depositan su confianza, así como grandes sumas de dinero, en los gerentes financieros”, dijo en un comunicado.

Morissette saltó a la fama siendo aún muy joven. Cuando su álbum de 1995 “Jagged Little Pill” ganó el Grammy como Álbum del Año tenía 21 años, convirtiéndose en la artista más joven en ganar ese prestigioso premio, un récord que posteriormente superó Taylor Swift.

La cantante de origen canadiense es autora de algunos de los éxitos más conocidos de los años 90, entre ellos “You Oughta Know”, “Hand in My Pocket” y “You Learn”.

El caso de Morissette rememoró la saga de otro artista canadiense en Los Ángeles, el fallecido Leonard Cohen, quien una década atrás descubrió que un exmanager le había robado 5 millones de dólares, por lo que el cantante y poeta se vio obligado a salir de su jubilación parcial.