El libro de Carlos Basso sobre el espionaje internacional en Chile, en particular el de la CIA, KGB y de los nazis, desde la segunda Guerra Mundial hasta inicios de los 90 (pasando por los años 60, gobierno de Allende y la dictadura), resulta ameno, entregando antecedentes como una novela policial.
Escrita para un gran público, entrega muchos datos relacionando agentes y criminales de los distintos servicios (incluida por cierto “nuestra” muy tristemente famosa CNI, Central Nacional de Informaciones, liderada por Manuel “Mamo” Contreras) que se vincularon a Chile como a casos trascendentes a nivel internacional, como el asesinato de Kennedy o un golpe de estado en Guatemala.
El mayor aporte de Carlos Basso es generar, a partir de muchos antecedentes conocidos (algunos muy conocidos) y otros desconocidos, un relato que muestra cómo manejan el poder (reflejado en el espionaje, los sabotajes, asesinatos y conspiraciones políticas) las grandes potencias: sin ética, sin la más mínima consideración por los valores que, en forma pública, dicen -o decían, en el caso de la URSS- defender.
Chile Top Secret, con todos sus aportes, se queda corto, deja gusto a poco. Es una suerte de barniz que no profundiza. Que saca brillo a la superficie pero deja ansias de mayor densidad, un texto menos “higiénico” y que se aventure más en hipótesis, en posibles interpretaciones.
Chile Top Secret
Carlos Basso
Aguilar
Penguin Random House Grupo Editorial
Santiago de Chile, mayo de 2016
