Contra la inocencia, de Alquimia Ediciones, es un pequeño libro en el que Gumucio aborda temas tan actuales como necesarios de reflexión: el orgullo, la belleza, la inocencia, el bien y el mal y, por supuesto, el “animalismo”.

“Supe que eso era el arte: una lucha contra la belleza con sus propias armas.” (Contra la belleza, pp 11)

Rafael Gumucio es inteligente, escribe bien, elige en forma precisa temas actuales para llevarnos por laberintos en busca de luz. Laberintos no exentos de provocaciones, de obsesiones y referencias a grandes pensadores, siempre de manera fluida y fácil de leer.

“Somos libres porque podemos ser nuestros propios padres, porque somos dueños de nuestra propia belleza, de nuestra propia fuerza.” (Contra la belleza, pp 25).

Y es con esa libertad que Gumucio transita a gusto y con ambiente de tertulia entre tópicos centrales de Occidente, tensionados por su ser individual (liberal) y sus planteamientos políticos.

“El problema hoy nunca es social o cultural o estructural, sino individual. Es quizás ésta la Victoria más inesperada del neoliberalismo: hasta su decadencia es leída en clave neoliberal. (Hambre de desierto, pp 47)

“Al político se le están permitidas más mentiras, más engaños, más fama y más poder que al resto de los ciudadanos, solo porque tiene que sacrificar su conciencia individual, su concepto personal del bien y del mal, en aras de la idea del bien y el mal del grupo.” (Hambre de desierto, pp 51)

Tal vez el mayor problema de “Contra la inocencia” es su propio autor, muy preocupado –aparentemente- de defenderse, de provocar (también admiración), de ir contracorriente generando –opinion muy personal- ruidos que atentan contra un libro interesante, que hace pensar, que plantea preguntas al lector (aunque no deje espacio para más respuestas que las propias).

“Culpamos a los pobres de su incapacidad de comprender las virtudes de su miseria, pero somos nosotros, la burguesía ilustrada o no, quienes hemos convertido la soberbia en seudónimo de riqueza, de salud, de belleza, de vida misma, de virtud.” (La inocencia del mal, pp 59)

“La inocencia con la cual algunas personas rigen su existencia, en relación con su modo de tratar con la humanidad y con los animales, explica la actual manera alienada de pensar y actuar de la sociedad, conductas construidas débilmente a partir de redes sociales, sin consideraciones éticas con respecto al otro ni exploración alguna de la propia intimidad…”. (Contra la inocencia, pp 75).

“Contra la inocencia” es un buen libro y, como muchos otros, creemos que es bueno leerlo desde el autor, desde su historia.

Contra la inocencia

Rafael Gumucio
Alquimia Ediciones
80 páginas
2016