En el amplio espectro de filmes en secciones paralelas, este año el Festival Internacional de Cine de Valdivia, FICValdivia, realiza un homenaje por los 100 años de Within our Gates, de Oscar Micheaux, y los 50 de, Wanda, de Barbara Loden, además de un foco al cine de resistencia y una selección inagotable de cintas desconocidas, malditas y perdidas.

Recordemos que este año, FICValdivia se desarrolla 100% online y puedes acceder a las exhibiciones de películas registrándose en su sitio web.

Afortunadamente, con el curso de las décadas, la obra del estadounidense Oscar Micheaux (1884-1951) ha cobrado mayor relevancia y difusión en la misma medida que el conflicto racial se ha agudizado durante la administración Trump.

A Micheaux se le puede considerar el primer gran cineasta afrodescendiente. Hijo de esclavos, comenzó a interesarse en literatura algunos años antes de que las posibilidades expresivas y populares del cine lo cautivaran.

Empezó a filmar en 1919 y, hasta poco antes de su muerte, tenía una obra de más de 40 filmes dirigidos, la mayoría de ellos autoproducidos.

A pesar de las restricciones económicas, de rodar fuera de los círculos gremiales, industriales y técnicos de Hollywood -y del efecto que esa situación produjo en el acabado formal de sus películas-, Oscar Micheaux registró con voluntad militante las vicisitudes de su comunidad, exponiendo las políticas de segregación y la violencia racial, específicamente los linchamientos y las violaciones, que seguían siendo persistentes durante la primera década del siglo.

La segunda película que Micheaux filmó, y que se creyó perdida hasta la década de los setenta, fue Within our Gates (1920), retitulada como La Negra después de su recuperación. En el filme, Michaux da cuenta de un gusto por abordar más de una línea narrativa. En este caso, en un primer segmento la narración avanza por una historia de amores frustrados y no correspondidos que tiene como centro a dos primas enamoradas del mismo hombre, una de las cuales tomará luego la misión de salvar a un colegio para niños empobrecidos e intentará conseguir una donación de una filántropa blanca.

Con esos elementos de base, Micheaux construye un relato que se extiende para describir distintos aspectos de la persistente condición de los afrodescendientes, desde los intereses creados en el entorno religioso y la criminalidad hasta la violencia racial ejemplificada en el linchamiento de un hombre y su familia, acusados injustamente del asesinato de un terrateniente blanco.

Este año, Within our Gates está cumpliendo un siglo de existencia y ese solo triunfo es suficiente para formar parte del primero de los dos homenajes con el que el FICValdivia ha programado para este año, porque a los cien años de Within our Gates se suman también los cincuenta años de una de las cintas independientes estadounidenses clave en la constitución del cine feminista contemporáneo. Wanda (1970), es la única película que la actriz Barbara Loden (1932-1980), artista ligada con igual propiedad al teatro que al cine, escribió, dirigió y protagonizó.

Rodado en 16 mm y con solo dos actores profesionales, el filme narra el deambular que emprende una joven mujer alcoholizada, luego de que es despojada por abandono de la custodia de sus hijos por su exmarido.

En su desplazamiento errático y autodestructivo, su vida cotidiana se acerca en más de una oportunidad a la delincuencia, impulsada muchas veces por las parejas esporádicas que ella va encontrando en su recorrido por los desamparados paisajes del noreste de Estados Unidos.

Wanda respira una sensibilidad cercana a la Nueva Ola Francesa, tanto en la manera en que se toma el tiempo para observar gestos, tipos humanos y costumbres con una impronta casi documental, como en la desdramatización con que Barbara Loden construye a su personaje y lo conduce de manera impasible hacia la tragedia existencial.

El filme obtuvo el premio a la Mejor Película Extranjera en el Festival de Cine de Venecia y, en virtud de su escasa llegada comercial, fue paulatinamente olvidado, en parte también por la prematura muerte, a raíz de un cáncer, de su directora.

No fue hace mucho que Wanda comenzó a despertar nuevo interés en la comunidad cinematográfica, relevancia que se debe, en parte, a la restauración y reedición del filme en el catálogo de The Criterion Collection.

Resistencia fílmica

En el marco de la muestra Cine y Resistencia, este año se ha articulado un programa doble que enlaza procesos sociales ocurridos en distintos lugares y tiempos, pero conectados por la misma voluntad reivindicativa.

El primero de ellos es Guerrilleros del Cinema, Cine Anarquista Español, que agrupa a obras producidas en los dos primeros años de la Guerra Civil Española, cuando las diversas agrupaciones sociales y sindicales se volcaron al registro fílmico como la única forma de expandir sus reivindicaciones y realizaron más de un centenar de películas de distinto formato y duración.

La muestra incluye once filmes: Aurora de Esperanza (1937), de Antonio Sau Olite; Reportaje del Movimiento Obrero en Barcelona (1936) y Barcelona Trabaja para el Frente (1936), ambos de Mateo Santos; Bajo el Signo Libertario (1936), de Ángel Lescaboura Santos; The Mass Tribute to Buenaventura Durruti (1936, anónimo); El Frente y la Retaguardia (1937), de Joaquín Giner; La Silla Vacía (1937), de Valentín R. González; En la Brecha (1937), de Ramón Quadreny; El Último Minuto (1936), de J. Bosch Ferrán; 20 de Noviembre de 1938 ¿Te Acuerdas de Esta Fecha, Compañero? (1937, anónimo), y Nosotros Somos Así (1937), de Valentín R. González.

Como complemento a esa muestra, el segmento Cine y Resistencia incluye también una selección de registros tomados hace casi un año atrás durante el estallido social en Chile y que pertenecen, entre otros, al Colectivo Registro Callejero, al Colectivo Cinematográfico Pedro Chaskel, a MAFI: Mapa Fílmico de un País, a Ceis.8 y a Ojo Chile.

Retrospectivas

Dentro de la exhibición de clásicos asociados a dos géneros entrañables para la cinefilia: el melodrama y el cine de suspenso. En esa línea, se exhibirá Los Asesinos Están Entre Nosotros (1946), de Wolfgang Staudte, uno de los primeros éxitos rodados en Alemania Oriental; Perro Callejero (1949), drama de arrabales de Akira Kurosawa inmediatamente anterior a Rashomon; La Muerte al Acecho (1953), un muy efectivo thriller de Ida Lupino sobre cómo el viaje en auto de dos jóvenes se convierte en una pesadilla cuando aceptan llevar a un convicto fugado; y El Castillo de la Pureza (1972), uno de los primeros grandes filmes del mexicano Arturo Ripstein.

La sección VHS Erótico trae distintas variables del género, comenzando por la versión pop de Hiedra Venenosa (1992), de Katt Shea; y siguiendo con Acosada (1993), de Philip Noyce, y La Insoportable Levedad del Ser (1988), la ambiciosa adaptación de Philip Kaufman de la novela de Milan Kundera.

Finalmente, en el segundo año de la sección Vazofi: Bazofi en Valdivia -colección de rarezas fílmicas de la Filmoteca de Buenos Aires programadas por el argentino Fernando Martín Peña-, se exhibirá un puñado de filmes “malditos”, es decir, películas que fracasaron económicamente por muchas razones.

En este apartado se ha programado ¡Qué Viva la República! (1965), del checo Karel Kachyna; Charly (1968), de estadounidense Ralph Nelson; Yamila, 1969), de la rusa Irina Polavskaya; Hail (1973), del estadounidense Fred Levinson; Captain Kronos, Vampire Hunter (1974), del inglés Brian Clemens; Las Aventuras de Picasso (1978), del sueco Tage Danielsson; Fortress (1985), del australiano Arch Nicholson, y Working Girls (1986), de la estadounidense Lizzie Borden.

FICValdivia está respaldado por una plataforma institucional compuesta por la Universidad Austral de Chile, el Centro Cultural de Promoción Cinematográfica de Valdivia, la Ilustre Municipalidad de Valdivia, el Gobierno Regional de Los Ríos y la Corporación para el Desarrollo de la Región de los Ríos.

Revisa el programa completo de FICValdivia 2020