Ayer fue confirmado el fallecimiento de la destacada bailarina chilena Belén Álvarez (80), figura clave en el desarrollo de la danza contemporánea en Concepción.
Tras formarse como bailarina en Viña del Mar, Belén fue parte del ballet del Teatro Municipal de Santiago, ciudad donde se radicó junto a su esposo, el fallecido camarógrafo y documentalista Dragomir Yankovic.
Con él, en 1973, se instaló en Concepción, y un año después fundó y dirigió el mítico Ballet Contemporáneo de Concepción, colectivo que en su primera versión integraron 30 jóvenes y con el que presentó obras como Cascanueces, Coppelia, Las sílfides y Paquita, tal como relató a la revista Tell en 2017.
La compañía marcó varios hitos: fue la primera proveniente de regiones en presentarse en el Municipal de Santiago, y también la pionera en ser invitada a un programa de TV de alcance nacional: el show Más Música.
En 2009, la trayectoria de Álvarez fue galardonada con el Premio Regional de Arte y Cultura.
“Como Municipalidad de Concepción, extendemos nuestras condolencias y pesar por el fallecimiento de la destacada bailarina penquista Belén Álvarez Cabezas, quien fue promotora y maestra de la danza en nuestra zona”, comentó el municipio en redes sociales.
“Queremos expresar nuestro apoyo a su familia en este difícil momento, acompañando la esperanza de que el legado de esta gran bailarina y maestra prevalecerá en el alma penquista”, agregaron sobre el fallecimiento, del que hasta ahora se desconoce su causa.
En diálogo con BioBioChile, José Miguel Arjona, director de la escuela de flamenco que lleva su nombre, lamentó el fallecimiento de la bailarina en la coyuntura sanitaria del Covid-19.
“No fue suficiente para hacerle los honores que ella merecía, pero vivió un vida muy sencilla y así fue su funeral, muy sencillo, donde parte de sus alumnas la despidieron al ritmo de la música clásica, con los pasos que ella alguna vez les enseñó”, recordó.
A través del Diario de Concepción, la bailarina y docente de danza moderna Paola Aste habló de la influencia de Belén Álvarez en la disciplina.
“Fue una de las intérpretes y coreógrafas transgresoras en la ciudad. Creó el ballet contemporáneo en 1974, y será recordada como una de las primeras bailarinas, teniendo la formación clásica del Ballet Municipal de Santiago, en realizar una apertura del lenguaje hacia la danza contemporánea en los setenta. Eso creo que es inolvidable, su labor coreográfica y de creación”, señaló.
