A horas que se conociera la condena a Harvey Weinstein por violación y agresión sexual, el productor de cine recibió un inesperado apoyo desde la cárcel.
Se trata del célebre comediante Bill Cosby, otro símbolo de las denuncias por abuso sexual en la industria del espectáculo estadounidense, quien por estos días cumple condena en Pensilvania.
“Es un día triste para el sistema judicial americano”, se lee en el mensaje que pidió divulgar en redes sociales a través de su representante, Andrew Wyatt.
Sobre la resolución del caso de Weinstein, Cosby fue explícito y arrojó una teoría al respecto: “No es sorprendente porque estos jurados tuvieron acceso a la cobertura de los medios y a la opinión pública. No hay forma de que nadie creyera que Mr. Weinstein iba a recibir un juicio justo e imparcial”, apuntó.
En su opinión, el juicio también demostró que “el juez quería una condena para enviar a los jurados a deliberar de nuevo, puesto que ellos quitaron muchos de los cargos”.
En la sentencia que será dictada el próximo 11 de marzo, Harvey Weinstein podría recibir hasta 29 años en la cárcel por los delitos antes mencionados, luego que fuera condenado por dos de los cinco cargos que se le atribuían.
Tal como argumentó en su propia defensa, Cosby ve aquí una “persecución” contra el fundador del estudio Miramax.
“Aquí está la pregunta que debería perseguir a todos los americanos, especialmente a los hombres ricos y famosos: ¿A dónde vamos en este país para encontrar justicia e imparcialidad en el sistema judicial y dónde encuentran un proceso como es debido?“, dijo el estadounidense, denunciado por más de 50 mujeres por abuso, agresión sexual o violación.
En el último tramo del mensaje, el comediante emplazó directamente al movimiento #MeToo, originado en octubre de 2017 a raíz del caso Weinstein y las numerosas denuncias de agresión y acoso sexual en la industria del entretenimiento.
“Retaría al movimiento #MeToo a regresar más de 400 años atrás y manchar los nombres de los opresores que violaron a los esclavos“, sostuvo Cosby, preso en Pensylvannia desde septiembre de 2018 por una condena que va entre los 3 y 10 años de prisión.