Vías Paralelas (1975), El zapato chino (1979) y Los deseos concebidos (1982) se estrenarán en el VIII Encuentro Internacional de Investigación sobre Cine Chileno y Latinoamericano.

A dos años de comenzar un proceso de rescate de las primeras películas del cineasta chileno Cristián Sánchez, el próximo jueves 6 de septiembre la Cineteca Nacional de Chile, del Centro Cultural La Moneda, estrenará las versiones restauradas de Vías paralelas (1975), El zapato chino (1979) y Los deseos concebidos (1982).

Las tres películas fueron rodadas en 16mm, su restauración es un proyecto financiado por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio a través del Programa de apoyo al resguardo del Patrimonio Audiovisual. y serán parte del VIII Encuentro Internacional de Investigación sobre Cine Chileno y Latinoamericano, que organiza anualmente la Cineteca Nacional. Además de su exhibición en sala, estarán posteriormente disponibles en su versión digital en la web de la Cineteca, en una publicación especial con documentos y materiales de época, tales como críticas y artículos de prensa.

“Para la Cineteca Nacional esta iniciativa se suma a 16 proyectos de restauración que hemos impulsado en nuestro laboratorio con el fin de rescatar un patrimonio que, de alguna manera, es conocido solo por algunas generaciones. En particular, la obra de Sánchez fue rescatada de los negativos originales, facilitados por su propio director, lo que hizo que se recuperaran los filmes en las mejores condiciones técnicas”, destaca Mónica Villarroel, directora de la Cineteca Nacional.

Seminario de especialización del archivo

Para los interesados en vivir esta experiencia con el cine de Sánchez, las actividades comienzan a las 10.45 del jueves 6 de septiembre con una presentación sobre la restauración de su obra en el marco del IV Seminario de especialización del Archivo de la Cineteca Nacional, a cargo de Pablo Insunza, coordinador de Conservación y plataforma digital y Marcelo Morales, encargado de Documentación y archivo online de la misma institución.

Luego, a las 12.30 se exhibirá el estreno restaurado de Los deseos concebidos. Y, al final de la jornada, se presentarán las otras dos películas: a las 18.15 El zapato chino, y a las 20.15 Vías paralelas.

Sánchez se involucró activamente en la etapa de restauración, destacando que lo más importante es la calidad con que las películas podrán ser revisitadas por algunos y descubiertas por otros. “Es extraordinario este proceso. Yo no busqué lo que pasó con las películas después. Pero se han escrito libros que las han revalorizado y habitualmente recibo correos de estudiantes que están haciendo alguna tesis y análisis. Y ahora, por primera vez, se van a ver muy bien”, dice el director, quien presentará ese día su película Vías paralelas, a las 20.15 horas. Esta cinta tuvo apenas un par de exhibiciones en su año de lanzamiento en un circuito restringido, por lo que prácticamente se trata de su estreno a público general.

Funciones especiales en sala

Además de las exhibiciones del 6 de septiembre, que serán abiertas a todo público, las películas tendrán funciones en sala ese mismo fin de semana: viernes 7 de septiembre, Vías paralelas; sábado 8, El zapato chino y domingo 9, Los deseos concebidos. Todas las funciones serán a las 20.15 horas.
Influido por Raúl Ruiz, su profesor mientras estudió cine en la Universidad Católica a inicios de los setenta, Cristián Sánchez comenzó la búsqueda de un lenguaje propio, con una estructura más clásica que la de su maestro. Esta mirada empezó a estructurarla en sus primeros trabajos, todos cortometrajes. Paralelamente comienza el rodaje del largometraje Esperando a Godoy (1972), que codirige junto con Rodrigo González y Sergio Navarro, pero que nunca llega a estrenarse.

Tras el golpe de Estado, Sánchez permanece en el país ahora con la perspectiva de reflejar en su cine la deriva social que se desata. De ahí surge primero el filme Vías paralelas (1975), codirigido con Sergio Navarro, que tampoco logra estrenar comercialmente. Rodado en 16mm y blanco y negro, su protagonista es un ex funcionario público que desea reintegrarse a su trabajo. En ese periplo, se topa con otros extraños personajes que sobreviven en este caos socio-político. Con la restauración digital se borraron manchas y rayas y además se hizo un trabajo de restauración sonora.

Ya cerrando la década, logra estrenar finalmente en público su primer filme: El zapato chino, que se exhibe en 1979 el Teatro de la Universidad Católica y en el Encuentro de Arte Joven de Las Condes. Protagonizado por un no-actor (Andrés Quintana, su actor fetiche) es realizado en plena dictadura con un mínimo de presupuesto (aportado en parte por la Sociedad Amigos del Arte) y en donde ya consolida sus búsquedas formales a través de la historia de un taxista enamorado de una joven mujer, mientras vagabundea por un confuso Santiago. La cinta recibe grandes elogios de la crítica de la época y se convierte en un pequeño fenómeno en el circuito alternativo. En 1981 participa en la competencia del Festival de cine de Nantes, Francia. Hoy es considerada por expertos como una de las mejores películas chilenas de los últimos 50 años.

Para restaurar este filme el realizador depositó en la Cineteca Nacional de Chile, el año 2009, tres rollos de negativo de imagen en 16mm, junto con un rollo de negativo de sonido. Aquí se realizó la digitalización de estos materiales y se hicieron trabajos de estabilización de imagen y borrado de rayas y manchas. También se restauró el sonido en el estudio Sonamos.

Con Los deseos concebidos (1982), retoma en parte a este personaje y exhibe su primera película en color en el Festival de cine de Berlín y en algunas salas alternativas en Santiago. Aquí el protagonista es “R”, un joven que vive con sus tíos y una hermana casi ausente, que es borrado de la nómina del liceo.

Esta película fue digitalizada desde cinco rollos de negativo de imagen en 16mm, además de cinco rollos de negativo de sonido óptico. Tras la digitalización en la Cineteca, se hicieron trabajos de corrección de color y algunos ajustes con manchas y rayas. También se restauró el sonido.