La asociación gremial Arte Contemporáneo Asociado (ACA) se refirió con una carta pública a la solicitud de renuncia por parte del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural al director del Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA), Roberto Farriol.

“La asociación gremial Arte Contemporáneo Asociado (ACA) tiene entre sus fines el velar por la existencia de buenas prácticas en las instituciones y entre los trabajadores del arte, así como tomar posición pública frente a los hechos coyunturales que involucren a las artes visuales”, se lee en el texto.

La carta fue firmada por la directiva actual del ACA, conformada por Luis Alarcón López, Ignacia Saona Urmeneta, Diego Parra Donoso, Claudio Guerrero Urquiza, Néstor Olhagaray Llanos, Claudia del Fierro Gallegos y Cristian Inostroza Cárcamo.

Aquí la declaración pública de la organización gremial sobre la actual situación del MNB:

Declaración Pública

1- Durante los últimos años, por diferentes medios se han hecho públicas una serie de antagonismos, descoordinaciones y eventuales conductas de acoso laboral al interior del MNBA, sin que esto haya determinado una respuesta contundente por parte de las autoridades. El director del museo resulta responsable, por acción u omisión, de que esta situación se haya sostenido durante tanto tiempo, lo que ha impactado negativamente en la imagen pública de esta importante institución, en el clima laboral en que se desempeñan los trabajadores del MNBA y en la propia calidad con que esta institución cumple sus funciones públicas.

2- Los derechos de los trabajadores deben ser objeto del máximo respeto por parte de las instituciones públicas. Por ello, las distintas acusaciones que se han generado desde el interior del Museo, ya sea en temas de acoso laboral o de manejo financiero, deben ser aclaradas.

La existencia de una resolución del Instituto de Seguridad Laboral en la que se identifica, entre las causas de la enfermedad laboral de una trabajadora del MNBA, la existencia de “conductas de acoso laboral como menoscabos, aislamiento, burlas, agresiones y trato despectivo” debe tomarse con el mayor cuidado. Resulta muy grave que cualquier trabajador o trabajadora esté expuesto a este tipo de conductas, las que deben ser investigadas y, de comprobarse, sancionadas.

En relación a esto, no podemos dejar de mencionar que desde los inicios de la dirección de Roberto Farriol se han conocido los obstáculos que han tenido a lo menos tres curadoras mujeres (Soledad Novoa, Macarena Goldenberg y Gloria Cortés) para trabajar bajo su gestión. Las tres curadoras han desarrollado (o intentado) proyectos de investigación y exhibición que proponen nuevas lecturas en torno a la colección en clave feminista, línea de trabajo que es importante fortalecer y continuar en el principal museo de arte público de Chile.

3. A través de la prensa se ha afirmado que el llamado a concurso para el nuevo director se realizará en pocos días, a riesgo de repetir el error de concebir este asunto como un problema personal, esto es, cambiar un director por otro. Creemos que reproducir este mecanismo nos desvía de la urgente necesidad de activar un análisis profundo y crítico acerca del futuro del Museo Nacional de Bellas Artes.

4. Se debe comprender que la misión estratégica del MNBA no puede dejarse a cargo de una sola persona y virtualmente por tiempo indefinido. Debe generarse un consejo que otorgue continuidad a políticas culturales de mediano y largo plazo, que genere consensos entre representantes de diversos sectores en torno a un nuevo perfil del MNBA, a su programación y a sus adquisiciones. Este organismo debiera contar, a lo menos, con representantes de instituciones relacionadas con el MNBA, de la sociedad civil y de sus trabajadores.

En ese marco, exigimos un proceso transparente que permita generar las condiciones para repensar colectivamente el perfil y la dirección del Museo Nacional de Bellas Artes.