A pesar del reconocimiento y las loas tras ganar un Globo de Oro en la categoría Mejor Actor de Comedia o Musical por su última película “The Disaster Artist”, las acusaciones por acoso sexual contra James Franco continúan generando eco en la industria cinematográfica.

Tanto así que ahora fue el mismo Franco quien tuvo que afrontar las críticas y entregar su propia versión de los hechos, luego que tres actrices que trabajaron con él (Violet Paley, Sarah Tither-Kaplan y Ally Sheedy) lo inculparan, en distintas circunstancias, de haberlas vulnerado y acosado sexualmente.

Dichas denuncias fueron publicadas en Twitter y casi al unísono durante la ceremonia que se desarrolló en Los Angeles, donde el actor recibió el galardón con un pin en su chaqueta con la leyenda “Se acaba el tiempo”, en clara alusión a la ola de testimonios de abuso que se han multiplicado en la industria del espectáculo.

“Bonito pin, James Franco. ¿Te acuerdas de la vez en la que me bajaste la cabeza hacia tu pene al descubierto en un auto? ¿O de la otra vez en la que le dijiste a mi amiga que fuera a tu hotel cuando tenía 17 años después de que ya te hubieran pillado haciendo lo mismo a otra chica diferente de 17 años?”, fue el mensaje que publicó la actriz Violet Paley al momento de ver a Franco sobre la alfombra roja de la ceremonia.

“Las cosas que he oído que están en Twitter no son precisas, pero apoyo completamente que la gente salga y sea capaz de tener una voz porque no tuvieron una voz durante mucho tiempo. Así que no quiero detenerles de ninguna manera. Es una cosa buena y lo apoyo”, contó Franco en diálogo con el comediante Stephen Colbert en el programa “The Late Show”.

“De la manera en que vivo mi vida, no puedo vivir si hay un resarcimiento pendiente (…). Si he hecho algo malo, lo arreglaré. Tengo que hacerlo”, agregó el actor, quien se refirió por primera vez al tema y aseguró que se disculpó con cada una de ellas por teléfono.

La polémica, sin embargo, sigue trayendo consecuencias para el actor: un encuentro público que tenía agendado con The New York Times para esta semana fue cancelada por el propio matutino, ya que aclararon que no se sentían “cómodos” por el revuelo de las declaraciones en su contra.