En una gira de diez días apoyada por UK Trade & Investment y Great Britain, el diseñador británico Tom Dixon visitó seis ciudades latinoamericanas para presentar su nueva colección, contexto que le permitió estar dos días en Chile.
Su estadía fue posible gracias a la coordinación de Sebastián Núñez, director de Interdesign, espacio dedicado al diseño, mobiliario e iluminación en Chile desde 1980. El primer día, Dixon dio una charla abierta a todo público en el Museo de Arte Contemporáneo en el marco del concurso “Piensa en Cobre 2015”— organizada por la Minera Los Pelambres, la Corporación Amigos MAC, la Universidad del Desarrollo e Interdesign.
En su segundo día, visitó la mina El Teniente (mina de cobre subterránea más grande del mundo) y presentó su nueva colección “Club”. Una ambientación dedicada especialmente a los productos de Tom Dixon en el piso menos uno de Interdesign puso en evidencia la relevancia de este reconocido diseñador nacido en Túnez. Sus principales muebles y luminarias de cobre, bronce y acero resaltan su sello industrial único.
Dixon manifiesta dos caras de la moneda que él mismo representa: por un lado, el delicado trabajo de la forma y los materiales; y por otro, el mercado y los negocios. Esta visión dual de lo que se convirtió en su profesión configura un aspecto muy importante de su trabajo, pues Tom no se ve a sí mismo como un artista, sino como un articulador entre los materiales, las técnicas, los procesos de manufactura y la gestión, los cuatro elementos que conforman la fuente de “inspiración” de sus productos. Sus creaciones no son fruto de una “iluminación”, sino que cada una está pensada desde la estructura, el peso, las matemáticas y las características de las materias primas. Además, busca crear productos de los cuales elimina tendencias, moda o aspectos decorativos.
Esta neutralidad es una de las cosas que más lo apasionan, pues el significado del producto no lo asigna él, sino que espera que cada usuario le conceda el carácter que más le hace sentido. Para ello no pretende aferrarse ni hacerse experto en un solo producto o material, sino que le gusta cambiar de obsesiones y aprender lo que más pueda de cada una de ellas.
Innovación en botella
Bajo el marco de la Milan Design Week de 2017, Tom Dixon, entre las piezas que presentó, destaca una, la que ha creado de la mano de la firma del whisky escocés Johnnie Walker Blue Label, el que se caracteriza por ser una mezcla única en la que tan solo 1 de cada 10.000 barricas procedentes de toda Escocia son seleccionadas para utilizarse en ella.
El aclamado diseñador británico ha elaborado un diseño exclusivo: Johnnie Walker Blue Label Capsule Series, una perfecta combinación entre artesanía y vanguardia, inspirada en la importante trayectoria del whisky escocés con un trabajo detallado y minucioso en cobre que permite resaltar la importante historia del producto
Por su parte, Dixon afirma que es importante no quedarse estáticos, como en el logo del hombre caminando de Johnnie Walker, con todas sus referencias históricas asemejándose a lo contemporáneo, lo que representa una progresión hacia adelante. “El cobre permanece, los barriles del roble y la experiencia suprema necesaria para producir un producto clásico también”, agrega.
