El Festival de Danza propone distintas reflexiones y miradas de autores de todas las latitudes en 18 días de intensa programación, con intervenciones urbanas y de sala.

Una apertura intensa y asombrosa tuvo en Valparaíso, el 15° Festival de Danza Contemporánea Danzalborde el que continúa durante la próxima semana y hasta el 9 de noviembre, con una cartelera llena de sorpresas y propuestas, que invitan a reflexionar sobre el lenguaje de la danza contemporánea, su relación con el entorno, la ciudad, la historia y las construcciones simbólicas.

Iván Sánchez co Director del Festival Danzalborde reflexiona sobre estas propuestas y su relación con la mirada que propone el evento: “Ha sido muy interesante partir con las intervenciones y las obras de sala que evocan tres temas que nos interesan: la imagen del cuerpo en la ciudad y la resistencia, de Clarice Lima; el trabajo local y también la propuesta de Roser López, que nos invita a buscar distintas formas de volar y nos parece, que eso resume en parte, los factores que nos mueven año a año para realizar Danzalborde”.

“Árboles/ plantación”: resistencia corporal y política

Una de estas presentaciones que no ha dejado a nadie indiferente, es la performance “Árboles/Plantación” de la bailarina y coréografa de Sao Paulo, Brasil, Clarice Lima, quien irrumpe en espacios urbanos con su propuesta sobre los límites de la resistencia del cuerpo y de la resistencia política junto a intérpretes locales, especialmente convocados para este despliegue. Es “un ejercicio sobre el deseo de permanencia, invirtiendo el espacio y el tiempo y cuestionando el tiempo. Incluso cuánto el cuerpo aguanta. El trabajo surge como deseo de enraizamiento en la ciudad, donde personas vestidas con un mismo traje, habitan en espacios de paso. Allí se contraponen al flujo del movimiento”.

Clarice Lima, agrega que “la experiencia fue muy buena, y las personas de acá también. Esta utopía de cómo podemos quedarnos en los sitios, cómo la resistencia del cuerpo se transforma también en una resistencia política, de hacer de la danza, porque un cuerpo que se queda ahí, un tiempo, estando de cabeza hacia abajo, creando otra posibilidad de ser del cuerpo en la sociedad, es una forma también de pensar qué es el hombre hoy, cómo estamos en el mundo hoy”.

“Lowland”, el vuelo y la estrategia de la bandada

La catalana Roser López junto al bailarín Guy Nader, en la jornada de apertura del Festival en el Parque Cultural de Valparaíso, nos ha maravillado con su obra “ Lowland”, una incursión por el despliegue y destreza de las aves y su vuelo, y las metáforas que el cuerpo construye a través de esta investigación: “Versa sobre el deseo de volar, parte de la fascinación de las migraciones de las aves y es un acercamiento físico a través del movimiento y el trabajo en equipo sobre esos viajes y odiseas que hacen las aves dos veces al año. Viendo las naves migrar, aprendí que las migraciones son viajes en los que van al límite de sus capacidades, es un reto de esfuerzo enorme y lo logran porque trabajan en equipo.

Las aves funcionan con un objetivo común, en cada bandada y todas colaboran para llegar a su destino, entonces hubo un aprendizaje muy bonito, sobre el trabajo compartido, sobre el liderazgo que supone el trabajo de colaboración y buscamos cómo a través de la danza, podíamos crear estrategias que se acercaran a ese trabajo de colaboración. Entonces, nos pusimos un reto, a nivel de resistencia, entre otras cosas, a nivel de ligereza en el movimiento, cómo podíamos llegar a esa idea de volar a través de nuestras capacidades, a través de los saltos, de la ligereza, de la repetición, del batir de las alas, movimientos que sugirieran el movimiento de las aves de alguna forma, con una aproximación un poquito acrobática, y cómo podíamos ponernos un reto a nivel físico, de resistencia y qué juegos podíamos crear entre los dos bailarines para mejorar este reto.”

Ejercicio 3 de Pseudónimo Compañía de Arte Contemporáneo

Como parte de la selección de compañías nacionales, la intervención urbana EJERCICIO 3 de Pseudónimo Compañía de Arte Contemporáneo, de Santiago, se presenta por primera vez en Valparaíso. La performance indaga en la sutileza del gesto y la utilización de objetos simbólicos, donde dos enigmáticos sujetos se reúnen e interactúan irrumpiendo la cotidianidad del espacio en el cual se desarrolla.

Gabriel Miranda, quien es músico e intérprete de la intervención, explica que a través de ella buscan “llegar no tan solo a quien está instruido en artes escénicas, sino al público en general y que a ellos también les pasen cosas, que la gente se sorprenda”. Ya que la pieza es una invitación a “que la gente se cuestione, se pregunten, reflexionen, que les sucedan emociones también, abrimos el espectro de posibilidades, para que ellos creen su mundo imaginario con las imágenes que les proponemos y los gestos”, agrega Ninoska Soto, quien también integra la compañía.

“SunBengSitting”: la búsqueda de la identidad y sus contradicciones

Así también “SunBengSitting” del austriaco Simon Mayer, propone a la audiencia una obra muy interesante en que el coreógrafo, bailarín y músico, despliega en escena el conflicto entre la identidad tradicional de la montaña y el ser urbano, un viaje al pasado en busca de la identidad, para conocer las contradicciones y la indignación de tener que asumir las convenciones impuestas, tal como él lo explica “ estoy muy feliz de tener esta oportunidad de presentarme aquí, pues tengo una relación muy especial con Latinoamérica y siento una especial conexión con Chile. He trabajo mucho con las tradiciones y las danzas tradicionales, su música, las danzas rituales, por lo tanto, estoy muy influenciado por estas danzas de distintas partes del mundo como Europa, Latinoamérica y Africa, las que he realizado por mí mismo y he descubierto que en otras partes del mundo, otras personas también lo realizaban, entonces he estudiado e investigado más, me he reunido con las personas y he analizado videos y esto lo he incluido en mi performance“.

15 años de Festival de Danza Contemporánea Danzalborde

Son distintas propuestas y miradas desde todas partes del mundo, que confluyen en la versión n° 15 del Festival de Danza Contemporánea Danzalborde y que este año tiene un especial carácter de celebración por la trayectoria y las experiencias vividas. También de reflexión sobre las proyecciones que el Festival desafía para los próximos años, Iván Sánchez, co Director del Festival junto a Rocío Rivera, explica “estamos muy contentos de haber llegado a los 15 años, una meta no planificada y nos surgen muchas preguntas, sobre cómo empezar a transformarnos, cómo vincularlo más a la ciudad, pensando en que tiene 15 años y es como un adolescente y cómo este adolescente se comporta y también comenzar a romper sus propias estructuras, a desarmarse, a circular de nuevas formas, a tener otras ideas”.
El Festival de Danza Contemporánea Danzalborde, que cuenta con el fundamental apoyo del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, continúa incesante durante los próximos días, su programación completa en: www.escenalborde.cl