Una revisión de los dos años de la administración de la presidenta Michelle Bachelet se efectuó este lunes en el Palacio de La Moneda durante el consejo de gabinete.

Según destacó el ministro secretario general de Gobierno, Marcelo Díaz, que ya retomó sus actividades, la tónica de la reunión que convocó a los ministros en la sede del Ejecutivo fue evaluar los avances y logros, a poco más de una semana de que se cumpla la mitad del mandato de Bachelet.

“Estamos dando cuenta ya no solo del debate en materia de reforma educacional, sino que de su concreción, de su implementación y su traducción en beneficios concretos que están cambiando de manera muy radical el sistema educativo chileno y para bien”, afirmó.

Ahora los ojos del Gobierno están puestos en los desafíos pendientes, como lo son las leyes que serán promulgadas próximamente y los proyectos que están en el Congreso “en proceso de cierre“, como los describió el vocero.

Entre los que serán promulgados, Díaz mencionó la agenda de probidad, la ley de partidos políticos, la ley de financiamiento electoral, y la carrera docente.

De todos modos, el Ejecutivo monitoreará el avance de las iniciativas pendientes de ser votadas, como el proyecto de interrupción del embarazo en tres causales o la reforma laboral. “Hay proyectos a los que les llega su hora. Estos son proyectos, lo dije antes del receso del Congreso, son proyectos que corresponde que inicien ya su etapa decisiva de votación en el Senado y en la Cámara”, indicó el ministro.

En esta línea, sostuvo que si bien apuntan a aunar criterios y a generar consensos, esto no significa un hiato a largo plazo de la agenda legislativa.

“Nosotros buscamos siempre los acuerdos máximos posibles. Pero los proyectos no se pueden eternizar en el diálogo legislativo, llega el momento de votar”, afirmó.

En lo que respecta al ajuste fiscal que será detallado hoy por el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, Marcelo Díaz evitó profundizar, aunque dijo que el enfoque serán “las personas” y se privilegiará el gasto social.