De en momento de alegría disfrutaron este sábado los jugadores del FC Barcelona, en el marco de una nueva práctica del primer equipo… y todo gracias a un chileno.

¿La razón? El portero del club y capitán de La Roja, Claudio Bravo, protagonizó una broma que hizo reír a varios de sus compañeros.

Resulta que el oriundo de Viluco se aprovechó de un descuido de Javier Mascherano y, luego de apropiarse del GPS del argentino, decidió arrojarlo a larga distancia, como cuenta Diario Marca.

La situación provocó de inmediato las burlas de los presentes hacia el trasandino, quien tuvo que ir en busca del importante objeto para continuar en la práctica.

Recordemos que en el FC Barcelona cada jugador entrena con un aparato, el que realiza diversas mediciones como kilómetros recorridos y la velocidad promedio, entre otros.

A continuación, te invitamos a revisar las imágenes del citado momento.