No sólo ganó la versión chilena del programa de cocina más importante del mundo, sino que además, la posibilidad de visitar Barcelona y conocer a los hermanos Roca, maestros en el arte culinario, cuyo restaurante es considerado el mejor del mundo.
Allí, Alfonso Castro, triunfador de la segunda temporada de MasterChef Chile, probó sus distintos platos y se deleitó con su extraordinaria gastronomía.
Estando en Barcelona, Alfonso no resistió la tentación de visitar el estadio de la ciudad y ver al chileno Claudio Bravo jugar en uno de los recintos deportivos más importantes del planeta.
Aprovechando su viaje por Europa, el ganador de Master Chef decidió quedarse unos días en el viejo continente y recorrer, junto a su hija Romina, ciudades como París, Pisa, Roma, Florencia, entre otras.
En esta última, visitó el Museo Piaggio, archivo histórico de sus adoradas motos vespa, otra de sus pasiones.
Recordemos que Alfonso se coronó el gran vencedor de MasterChef Chile tras derrotar a Maximiliano en una difícil prueba, el 29 de enero pasado.
A continuación revisa las fotos de Alfonso disfrutando uno de sus premios.
