En riesgo de ser derrotado en un referendo en que se juega una nueva reelección, el presidente boliviano, Evo Morales, planteó este lunes la posibilidad de debatir el papel de las redes sociales que “tumban gobiernos” y que son el arma favorita de la oposición en el país.

“Tal vez en el futuro va a ser importante debatir este asunto de las redes sociales; en algunos países con mala información tumban gobiernos, perjudican a su país si hay confrontación”, dijo Morales en rueda de prensa.

La oposición se valió de las redes sociales de internet, en especial de Facebook y Twitter, para combatir la pretensión del gobernante, que asumió en 2006, de lograr una reforma constitucional para tener derecho a postular a otro mandato de cinco años (2020-2025).

El mandatario, que fue víctima de acusaciones de tráfico de influencias en favor de una empresa china donde su ex pareja es una alta ejecutiva, dijo que este tema “es una preocupación que tengo”.

“Cómo por una cuestión de codicia, de envidia, de intereses de carácter sectorial o intereses ajenos a los intereses de Bolivia se puede hacer mentira, calumnia para dañar a Bolivia, porque finalmente no se está haciendo daño a Evo”, apuntó el jefe de Estado.

Dolido por el embate de la oposición en las redes, que plasmó -en su opinión- una suerte de guerra sucia, Morales dijo sentir que “quienes usan redes sociales con mentiras, están haciendo perder valores a las nuevas generaciones”.

Por primera vez en una década de arrolladores triunfos en las urnas, Morales enfrenta la posibilidad de perder el plebiscito, aunque él sostiene que esperará los resultados finales.

Un portal del Órgano Electoral Plurinacional señala que con el 72,5% de actas preliminarmente escrutadas, el No vence con 56,5% frente a un 43,2% del Sí.