El relleno sanitario Curaco fue nuevamente puesto en la mira dado el término del plazo estipulado de manera oficial, el pasado 10 de febrero, y donde sólo alcanzó el 50% de cumplimiento de faenas.

Sin embargo, a ello se suma la petición de más plazo para terminar la licitación, pero por sobre todo la solicitud de mayor presupuesto para la realización de un nuevo estudio de suelo, debido a los derrumbes registrados.

Una realidad que ya comienza a generar molestia en diversos actores políticos, vinculados a la aprobación de recursos gubernamentales. Uno de ello es el consejero regional PPD, Juan Carlos Duhalde, quien detalló que si bien la empresa a cargo de las obras, Servitrans, solicitó un plazo de 180 días, desde el municipio local se le otorgó sólo 135, poniendo como plazo final el 22 de julio de este año.

Pese a ello, para el consejero la dificultad técnica de los trabajos, que consisten en la implementación de una capa plástica en el lugar, hace prácticamente imposible que en un sólo semestre se puedan completar la totalidad de las faenas comprometidas en el proyecto inicial.

Para el consejero regional el tema que pone en mayor entredicho el proyecto y su ejecución tiene que ver con la posibilidad cierta de un nuevo estudio de ingeniería, debido a derrumbes detectados y la presencia de arcilla no adecuada, realidad no contemplada en el proyecto original y que ameritaría alguna investigación por parte del Gobierno Regional.

De todos modos, Duhalde aseguró que el Servicio Nacional de Geología y Minería se encuentra estudiando la situación, aún cuando a nivel gubernamental existe la seguridad de que tales pesquisas no serían necesarias.

Lo peor de todo es que dicho estudio de ingeniería no es gratis y su valor dependerá de si se realiza en el punto donde se registran los derrumbes o en todo el terreno donde se construye el relleno sanitario, pudiendo alcanzar más de 200 millones de pesos.

Recordemos que el relleno sanitario de Curaco ya ha sido puesto en cuestionamiento, sobre todo por los aumentos de presupuestos. En 2014 fue aprobado en Consejo Regional con un alza de más de 3 mil millones de pesos, superando los 10 mil millones, bajo el argumento del aumento del valor de materias primas, mano de obra, etc.

Posteriormente, en 2015 la obra también estuvo en el blanco de las críticas debido a que se descubrió que la arcilla del lugar no era la apropiada, por lo que se tuvo que “parchar” con una capa plástica especial.