Con 70 películas bajo el brazo, una veintena de apariciones en televisión y cinco nominaciones a los premios Óscar como Mejor Actor, el norirlandés Liam Neeson es un artista de renombre que ha sabido como mantenerse en cartelera.
Pese a su enorme talento, durante esta semana, el actor que interpretó a Oskar Schindler (La lista de Schindler, 1993) llamó la atención de las cámaras por un motivo distinto. Liam se dejó ver con apariencia de enfermo producto de una notable pérdida de peso que supera los 10 kilos.
La imagen del actor de 63 años que fue capturada mientras visitaba un juego de hockey en el Madison Square Garden de Nueva York, se suma a otras compartidas en las redes sociales que despertaron preocupación por el hombre de 1,93 m. de estatura.
Hope he hasn't….taken ill. “@DailyMailCeleb: Liam Neeson looks almost unrecognizable http://t.co/3iAbHyEl0L pic.twitter.com/F34oj6lOI9”
— Scott Brown (@_ScottBrown_) julio 29, 2015
Sin embargo, el representante del actor asegura que este cambio de masa corporal es producto de un nuevo papel y que Liam “nunca había estado más saludable”, según señaló el portal de Vanidades.
En la ocasión, reveló que Neeson interpretará a Cristovâo Ferreira, un jesuita renegado en el Japón feudal, el que forma parte del elenco de una nueva película de Martin Scorsese llamada Silence, la que estará en cartelera el año entrante.