Tras conocerse el anuncio del hallazgo en Argentina de Clara Anahí como la nieta 120, robada hace 39 años durante la dictadura, Juan Martín Padilla, portavoz de María “Chicha” Mariani, la abuela y una de las fundadoras de Abuelas de Plaza de Mayo, indicó que fue producto de “un error comunicacional”.
“Fue un error comunicacional bien intencionado de personas que quieren mucho a ‘Chicha’ Mariani”, dijo en rueda de prensa Padilla, quien agregó que la persona que firmó el comunicado que divulgaba el anuncio “se dejó llevar por la emoción de una persona que se acercó con un informe que daba resultado positivo” en las pruebas genéticas.
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Padilla explicó que Mariani, quien no estuvo presente en la conferencia, “está muy triste y dolorida”.
“Estuvimos con ella hasta recién y nos pidió que habláramos con ustedes”, precisó.
A pesar del revés, el portavoz y también biógrafo de Mariani fue enfático en afirmar que la búsqueda continúa. “Desde esta casa se va a seguir trabajando como siempre en la búsqueda de la memoria, verdad y justicia”, señaló.
La noticia del hallazgo, que se había basado en un análisis genético privado, fue difundida el jueves por la Fundación Anahí, dedicada a su búsqueda, pero el viernes la Unidad Especializada en casos de Apropiación de Niños y Niñas descartó la información.¨
El fiscal a cargo de ese organismo, Pablo Parenti, dijo este sábado que “no hubo ningún error del Banco Nacional de Datos Genéticos en la fallida aparición”, informó el diario La Nación.
“El estudio está perfectamente hecho y volvió a dar negativo, por lo que no hay ninguna correspondencia genética entre la supuesta nieta y Mariani”, aclaró.
El caso Clara Anahí es emblemático pues se conoció en todo el mundo a través de la difusión de unas cartas abiertas que le escribió Chicha Mariani a su nieta.
Una foto de Clara Anahí de bebé fue replicada durante décadas y en cada cumpleaños de la niña, mientras las redes sociales se han hecho eco de la búsqueda de la ahora mujer de 39 años.
“A los 91 años mi aspiración es abrazarte y reconocerme en tu mirada, me gustaría que vinieras hacía mí para que esta larga búsqueda se concretara. Es el mayor anhelo que me mantiene en pie el que por fin nos encontremos”, había escrito Mariani en marzo pasado.
A diferencia de Clara, la mayoría de los 119 nietos recuperados nacieron mientras sus madres, luego desaparecidas, estaban en cautiverio en uno de los más de 500 centros clandestinos instalados en el país durante el régimen dictatorial.