El desafío ambiental que implica para la región el plan de descontaminación por declaración de zona saturada abordaron hoy autoridades y gremios empresariales. En la actividad, irrumpieron trabajadores unidos contra el asbesto que aseguran estar enfermos luego de trabajar en Bocamina.
En el evento el empresariado dejó en claro cuál será su aporte en la gestión del plan de descontaminación que elabora el gobierno para enfrentar la condición de saturación por material particulado que exhiben actualmente 10 comunas del Concepción Metropolitano.
Los gremios desarrollan una propuesta para reducir emisiones y estudian opciones de mitigación, pero Hernán Celis, presidente de la Cámara de la Producción y del Comercio de Concepción, apuesta todo a la llegada del gas natural que reemplace otras fuentes de energía que actualmente se utilizan.
El encuentro desarrollado en el Hotel Diego de Almagro fue escogido por una veintena de trabajadores de Coronel para intentar hablar con las autoridades sobre los problemas de salud que los aquejan tras haber retirado asbesto desde Bocamina 1 de Endesa en Coronel. No pudieron acceder al salón, pero en el pasillo enfrentaron al seremi de Medio Ambiente haciéndole ver que se sienten engañados.
Richard Vargas, seremi de Medio Ambiente, respondió que si bien el tema incumbe a salud y no a su cartera, es sabido que un sumario sanitario reconoció faltas de procedimiento en el proceso de retiro de asbesto de Bocamina.
Finalmente, no fue necesario que actuara Carabineros para el desalojo de los trabajadores, que esperaban al intendente para hablar con él, sólo que la primera autoridad regional evitó cruzarse con ellos y fue sacado del hotel por un ascensor que lo llevó directamente al estacionamiento.
