La Municipalidad de Concepción aún está a la espera de la respuesta de la Contraloría Regional respecto a la solicitud de reconsideración que envió la casa edilicia para intentar aclarar si las butacas que debían instalarse en el Estadio Ester Roa Rebolledo eran abatibles o fijas, pronunciamiento que pronto debería emanar desde el ente fiscalizador.

No obstante, el ex concejal Jorge Condeza, quien ha seguido de cerca la polémica, ingresó dos nuevos requerimientos a la Contraloría para que investiguen otras aristas en las que considera, podría haber irregularidades. El primero tiene que ver con una de las primeras licitaciones que realizó el IND por los asientos, mientras que el segundo respecto de la instalación de las butacas.

El concejal de Renovación Nacional, Joaquín Eguiluz, indicó que junto a Alejandra Smith entregaron la misma documentación ingresada en los requerimientos a la Fiscalía para que investigue estos puntos que, a juicio del edil, no habían sido considerados.

Recordemos que la Contraloría en su informe de fiscalización de obra pública, cuestionó la instalación de butacas que debían ser abatibles y no fijas en un sector más amplio del recinto deportivo, por lo que, eventualmente la empresa Claro Vicuña Valenzuela tendría que devolver una millonaria suma de dinero. Según las primaras estimaciones de los concejales denunciantes, serían cerca de 900 millones de pesos.