El Gobierno se defendió de las críticas de las familias damnificadas por la erupción del volcán Calbuco, confirmando que la ayuda por la emergencia se terminó.

Los dirigentes de Lago Chapo y Río Blanco dieron a conocer su preocupación por la falta de empleos en la zona dañada por la erupción, debido a que las pisciculturas, principal fuente laboral, resultaron destruidas.

El seremi del Trabajo en Los Lagos, Gonzalo Reyes, manifestó que es atendible el planteamiento de los vecinos, pero afirmó que están realizando las gestiones para dar respuesta a la problemática.

El intendente Leonardo de La Prida, aseveró que se reunirá con los dirigentes para evaluar la situación, confirmando que los bonos que se asignaron para los damnificados por la erupción están finalizando, ya que la emergencia ha pasado.

Esta no es la primera vez que los damnificados acusan lentitud y olvido de parte del Gobierno, pues si bien se les permitió regresar a sus viviendas, no se sienten considerados en las soluciones a los problemas que dejó la catástrofe.