En un discurso ante el Parlamento instalado en Versalles, el presidente de Francia, François Hollande, reiteró que los crímenes ocurridos durante la tarde del viernes en París son “actos de guerra” y que “no debemos tener compasión” ante esos hechos.

Hollande agradeció las muestras de solidaridad que se dieron en todo el mundo tras el asesinato de 129 personas, y el mandatario señaló que ya se logró establecer cómo se gestaron los crímenes.

“Los actos de guerra del viernes se se planearon en Siria, fueron organizados en Bélgica y se llevaron a cabo en nuestra tierra con complicidad francesa buscando un objetivo claro; sumirnos en el miedo, dividirnos, ponernos presión, impedir que actuemos contra el terrorismo en el oriente medio”, manifestó.

Recordó también que éste no es el primer episodio de estas características, ya que otros actos terroristas han cobrado vidas en diversos puntos del orbe atribuidos a Estado Islámico.

“Por esa razón, debemos destruir a Daesh” -nombre peyorativo con el que se refieren a Estado Islámico en Europa-, advirtió, destacando que los últimos bombardeos en Siria con los que Francia respondió a los atentados acabaron con puntos claves para esta organización.

Adicionalmente, expresó que se ha propuesto una serie de medidas de modificación constitucional, como el aumento de los poderes excepcionales del Estado, la realización de registro de inmuebles sin contar con una orden judicial, el aumento de las penas para quienes incurran en actos terroristas e incrementar la dotación de jueces y gendarmes.