Los servicios secretos alemanes espiaron a varios países aliados, como Estados Unidos y Francia, por su propia iniciativa, afirman el jueves varios medios de prensa alemanes.

El Servicio Federal de Inteligencia (BND por sus siglas en alemán) fueron acusados recientemente de haber espiado a dirigentes franceses y europeos a pedido de la Agencia de Nacional de Seguridad (NSA) de Estados Unidos.

La BND espío, esta vez por su cuenta, varias embajadas y administraciones “de países europeos y aliados”, en particular de Francia y Estados Unidos, lo que no forma parte de sus competencia.

La BND utilizó sus propios “selectores” (palabras clave, nombres, números de teléfono o de tarjetas de crédito…) y también los que la NSA le había entregado, indicaron la radio RBB y el sitio internet del semanario Der Spiegel.

La práctica duró varios años y terminó en 2013, indicaron los medios, que citaron fuentes reservadas. Estas últimas, además, indicaron que la comisión parlamentaria de control de las prácticas de espionaje organizará una audiencia la semana próxima para interrogar a varios agentes del BND.

En el otoño boreal de 2013, la revelación de que el teléfono de la canciller Angela Merkel había sido intervenido provocó una fuerte tensión entre Alemania y Estados Unidos.

“Espiar a los amigos es totalmente inaceptable”, había dicho Angela Merkel.

La justicia alemana inició una investigación que archivó en junio pasado.