El partido suizo UDC (derecha populista), mayoritario en el Parlamento, protestó el sábado por los viajes al extranjero realizados por refugiados o demandantes de asilo.

En una entrevista publicada este sábado en el diario Le Temps, el vicepresidente de la UDC, Adrian Amstutz, anunció que presentará una intervención en este sentido en la sesión parlamentaria de otoño.

La Secretaría de Estado suiza para las Migraciones (SEM) dijo que entre 2011 y 2015 se concedieron unas 50.000 autorizaciones de viaje a refugiados y demandantes de asilo, especialmente para visitas a familiares o para asistir a entierros.

Los eritreos son los primeros beneficiados (15.158 autorizaciones), seguidos por los somalíes (7.118) y los iraquíes (3.786).

Según el SEM, un refugiado reconocido por las autoridades puede obtener una autorización para viajar, salvo a su país de origen, so pena de perder automáticamente su estatuto de refugiado.

La última edición del dominical NZZ am Sonntag, asegura que algunos eritreos viajan a su país, pago en divisas en el consulado general de Eritrea en Ginebra mediante.

“Nadie se cree que un régimen de no derecho permita de repente, con motivo de un entierro, a una persona que dice estar amenazada en su vida y su integridad física, entrar o salir del país”, declaró Amstutz.

Para la UDC, “quienes deciden partir deben salir definitivamente de Suiza, deben renunciar al asilo y a toda protección de nuestro país”.

La UDC se fija especialmente en los eritreos, cuyas peticiones de asilo en Suiza se dispararon en los últimos años.

Respecto a los eritreos que huyen del largo y duro servicio militar establecido en 1996, Amstutz indicó que “deben cumplirlo para participar en la reconstrucción de su propio país”.

La deserción no puede ser por si misma un motivo de asilo, e incluso si fuera el caso, ¿por qué huyen todos con predilección por Suiza y no a otro país seguro cercano al suyo?”, añadió.

En el primer trimestre de 2015 se realizaron 4.489 demandas de asilo en Suiza, procedentes principalmente de ciudadanos de Eitrea, Sri Lanka y Siria.