Un grupo de bacterias fueron encontradas en los restos del poeta Pablo Neruda, según un informe elaborado por expertos españoles en el marco de las diligencias judiciales que buscan aclarar la muerte del Nobel.

Se trata de los primeros resultados del Informe de Análisis de Muestras de los restos del vate chileno, elaborado por especialistas de la Universidad de Murcia, y que fueron entregados por el ministro en visita Mario Carroza.

Recordemos que dichas indagaciones se realizaron con el fin de determinar la causa de muerte de Neruda en 1973, y si éste deceso se habría producido por el agravamiento de un cáncer de próstata, como sostiene su certificado de defunción, o si falleció luego de ser inoculado con una misteriosa inyección un día antes de emprender viaje a México, donde pensaba exiliarse y comandar la oposición a Pinochet, como denuncia su ex chofer, Manuel Araya.

Dichas dudas pretenden ser aclaradas por la investigación del juez Carroza, quien recibió el informe proteómico realizado por el doctor Aurelio Luna Maldonado, especialista en medicina legal y forense de la Universidad de Murcia.

Las pericias se realizaron en base a la extracción de proteínas desde muestras óseas de los restos del poeta y que fueron enviadas por el Servicio Médico Legal, según la información oficial.

El análisis descubrió tres tipos de proteínas en los restos del reconocido poeta chileno, de acuerdo a lo señalado en el informe. “Un primer grupo de proteínas relacionadas con el proceso tumoral que confirman el diagnóstico previo de cáncer de próstata diseminado”, inicia.

Además se precisa el hallazgo de un segundo grupo de proteínas inflamatorias “que reflejan un proceso de inflamación inespecífico, compatible con el propio proceso canceroso y con procesos de tipo infeccioso. La presencia de proadrenomedulina es compatible con una insuficiencia respiratoria aguda”.

Por último, y quizás lo más importante, se descubrió un tercer grupo de proteínas bacterianas “de las que resulta muy difícil establecer o excluir la presencia de un proceso infeccioso agudo en las últimas horas de vida del poeta (de otra parte se trata de restos que han sido reinhumados y manipulados)”, se señala.

“El análisis de datos requiere de dosis oportunas de prudencia, para evitar conclusiones aventuradas en ausencia de informaciones adicionales de las que en este momento carecemos”, sentencia el documento.

Por último, se especificó que los resultados no son concluyentes, puesto que aún deben ser debatidos en el Panel de Expertos designados. A lo anterior, se suma que se encuentra pendiente aún la recepción del informe genómico encargado al doctor Cristián Orrego, cuyos resultados se darán a conocer oportunamente.

No obstante, con este informe se abre una nueva etapa de investigación para establecer si el deceso del Nobel de Literatura se debió al cáncer que padecía o existió la intervención de terceros.