Al menos cuatro personas murieron en enfrentamientos este jueves en Burundi, escenario desde hace doce días de manifestaciones protagonizadas por los oponentes a un tercer mandato del presidente Pierre Nkurunziza, según periodistas de AFP, la policía y Cruz Roja.

Tres de las víctimas fallecieron en la capital, Buyumbura, y otra en un municipio al sureste de la capital.

Los periodistas de AFP vieron los cuerpos de dos víctimas, uno con una bala en la cabeza y el otro, carbonizado. Por su parte, la Cruz Roja indicó que una persona gravemente herida en una explosión de granada había muerto por las heridas.

La cuarta víctima, un adolescente de 15 años, murió por los disparos de un policía en Gisozi, un pueblo ubicado a unos 80 kilómetros al sureste de Buyumbura. Según el portavoz de la policía, el agente “parecía responder a los tiros de los manifestantes”.

El jueves por la mañana, en el barrio periférico de Kinama (norte de Buyumbura), un pequeño grupo de manifestantes se enfrentó a los partidarios del gobierno, según ellos, miembros de Imboneraukure, la organización juvenil del partido en el poder.

La policía abrió fuego contra los manifestantes, matando a uno de ellos. Los Imboneraukure, que la ONU califica de “milicias” del poder, están acusados de intimidar a los oponentes de Nkurunziza.

Desde el pasado 26 de abril, Buyumbura es escenario de manifestaciones en las que se producen enfrentamientos, a veces violentos, entre los oponentes de Nkurunziza y la policía o los Imbonerakure.

Desde que comenzó el movimiento, calificado de “levantamiento” por el gobierno, que se refiere a sus participantes como “terroristas”, al menos 18 personas han perdido la vida.

El jefe del Estado, elegido por primera vez por el Parlamento en 2005 y una segunda vez en 2010 por sufragio universal directo, fue investido candidato por su partido, el CNDD-FDD, el 25 de abril.

Sus oponentes consideran que esta nueva candidatura es inconstitucional, lo que el entorno presidencial rechaza.

El Tribunal Constitucional, al que los manifestantes acusan de imparcialidad, dio la razón el martes a Pierre Nkurunziza, que el miércoles confirmó que se presentaría de nuevo a la presidencia.